Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
DOS REALIDADES
➔ El nivel de Asensio con La Roja le está haciendo ganar muchos enteros de cara su renovación con el Madrid ➔ Hazard no levanta cabeza ni siquiera con Bélgica, con la que fue titular en su estreno y es capitán
➔ De todos los episodios del Mundial de Qatar de los que el Real Madrid está siendo testigo desde la distancia, hay dos que le afectan de una manera bien distinta. Para bien y para mal. Una buena noticia y otra mala. Se trata, evidentemente, del crecimiento de Marco Asensio con España y del camino opuesto que está realizando Eden Hazard con Bélgica.
Está claro que queda mucho torneo, pero en tan solo 90 minutos ambos jugadores han pasado por Doha y sus conclusiones, que en un principio tenían el mismo objetivo, han sido bien distintas.
La buena
Por un lado, la conclusión buena la ha mostrado Marco Asensio. El nivel del balear en los últimos partidos con el Real Madrid incitaba a pensar que iría a más pero la selección siempre se le ha atragantado. Sin embargo, Luis Enrique le ha devuelto la ilusión y le ha conectado de tal forma que en el estreno ante Costa Rica fue el delantero titular por delante de Álvaro Morata y marcó un gol, el mismo que llevaba en sus 30 partidos anteriores con La Roja.
De todo ello están tomando nota en Valdebebas cuyo parón de selecciones iban a utilizar para arremangarse con su renovación. Y es que ese es otro de los principales alicientes que tiene el jugador pues sabe que en junio de 2023 termina contrato y el Mundial es el gran escaparate que está usando para conseguir un mejor trato con el club. Escaparate y escudo, pues cuando le preguntan por su futuro y sus posibles destinos, afirma que está feliz en el Madrid, que el futuro no lo sabe nadie pero que ahora el Mundial es el Mundial. Así las cosas, a Marco Asensio como mínimo le restan dos partidos para seguir brillando más los que se presupone que disputará la selección de Luis Enrique a la que ya nadie descarta para nada después de su gran estreno.
La mala
Y en la otra orilla del conflicto madridista de Qatar está Hazard. El belga, que con su selección tiene más voz, hizo el mismo ruido que de blanco. Es decir, ninguno. Ni siendo titular, ni estando arropado por sus compañeros de los cuales es el capitá, el ex del Chelsea pudo pasar de la barrera ya habitual de los 60 minutos.
Cumplida la hora de juego y sin apenas jugadas a destacar, enfiló el banquillo siendo el primer cambio de Roberto Martínez y agotando la primera de las balas que tiene para demostrar que quiere volver a ser el de antes.
Algo que, por otro lado, ya no parece tener vuelta atrás después de tantos y tantos intentos fallidos.
Así pues, al Real Madrid solo le queda seguir asistiendo como testigo a lo que hagan sus futbolistas en esta Copa del Mundo y si alguno no se revaloriza, por lo menos que no se devalúe