Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Mbappé mete a Francia en octavos
Anotó un doblete ante una valiente Dinamarca que llegó a empatar gracias al barcelonista Christensen y ya suma tres goles en el Mundial
➔ Un doblete de un enorme Kylian Mbppé clasificó a Francia para los octavos de final del Mundial. La vigente campeona, que sufrió para derrotar 2-1 a una valiente Dinamarca, es la primera selección que se asegura el pase matemático. En el intercambio de golpes en un partido abierto reinó la calidad y la potencia del delantero del PSG, que con tres goles alcanza al ecuatoriano Enner Valencia en la cabeza del Pichichi.
Francia juega al despiste. No es una selección que salga a dominar el partido de forma decidida mediante la posesión del balón. Tampoco encierre al rival en su área con ataques constantes. Sin embargo, Didier Deschamps repitió ante Dinamarca su apuesta ofensiva del 4-1 a Australia en el estreno, con cuatro delanteros en el once: Dembélé y Mbappé de extremos habilidosos y vertiginosos, Giroud de ariete rematador y Griezmann dando equilibrio con su calidad técnica y su solidaridad defensiva como supuesto centrocampista. Por lo tanto, parece dormida, pero cuando encuentra espacios y puede acelerar en los últimos 30 metros es un espectáculo. No sólo por la presencia de los cuatro citados, también por las subidas por la izquierda de un avión, Theo Hernández, sustituto de su hermano, el gravemente lesionado Lucas.
El primero que cayó en la trampa fue el barcelonista Christensen, que en una jugada tranquila en la que creía controlado un pase profundo de Griezmann se encontró a Mbappé al galope, directo a la portería. Le agarró y se jugó una roja que quedó en amarilla por los pelos. Y de esa falta lejana llegó la primera clara ocasión en el 21’, un cabezazo en carrera de Rabiot tras servicio de Dembélé que despejó Schmeichel.
Se tomó un respiro Francia hasta que Mbappé volvió a mostrar toda su potencia desbordando a Andersen y centrando al segundo palo, donde apareció Koundé para soltar un disparo que sacó Hjojberg. Y otro cambio de ritmo de Griezmann acabó en disparo cruzado que desvió con el pie Schmeichel.
Pero Dinamarca no tiene miedo a Francia. Por algo le ganó dos veces en la reciente Nations League por 1-2 y 2-0. Lo demostró Kasper Hjulmand con un once ofensivo, con los talentosos y rápidos Lindstrom y Damsgaard junto al tanque Cornelius, quien en el 36’ tuvo el 0-1 en sus botas en una contra que finalizó con un disparo desviado. Replicó un activo Dembélé con otro gran pase que
Mabppé, desmarcado, envió a las nubes antes del descanso.
Dinamarca siguió siendo valiente tras el descanso, esperando, pero sumando efectivos al ataque cuando recuperaba el balón. La entrada de Braithwaite por el amonestado Cornelius le dio velocidad. Y, aunque sin crear peligro, pisó más área. Error. Es lo que quería Francia. Dinamarca no lo sabía, pero estaba firmando su derrota. Mbappé vio huecos y los atacó. Primero, con un jugadón en velocidad, lanzando un misil que desvió Schmeichel. Luego
apareció Griezmann con un gran control y un remate defectuoso. Y a la tercera fue la vencida: aceleración de Mbappé, pared con Theo y remate del ‘10’ al primer toque que rozó en Christensen y entró.
Pero esta Dinamarca tiene un espíritu competitivo admirable y empató en el 68’ con uno de sus fuertes: el balón parado. Templó Eriksen un córner, lo peinó Andersen y Christensen, más vivo que Rabiot en el segundo palo, cabeceó el 1-1.
Los últimos 20 minutos fueron una batalla de área a área. Lloris
evitó el 1-2 de Lindstrom con Francia todavía ‘tocada’ por el 1-1. Pero el susto le duró poco a los ‘bleus’. Koundé casi marca de cabeza y Rabiot mandó fuera una chilena espectacular. Y a la contra, servicio de Dolberg y remate en el primer palo de Braithwaite que rozó el poste.
Al intercambio de golpes, Francia tenía todas la de ganar. Y así fue: centro envenenado y cerrado de Griezmann y remate con el muslo de Mbappé junto al poste, rompiendo el fuera de juego. Era el minuto 86 y Dinamarca ya no reaccionó ●