Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
SE PONEN A CIEN
➔ El Barça más ofensivo anota 100 puntos contra el Granada dos días después de los 96 al Baskonia ➔ Los 14 primeros minutos, casi perfectos: los de Saras solo fallaron uno de sus primeros 22 tiros
Dos días después de superar al Baskonia en Euroliga (96-84) el Barça volvió a demostrar ayer lo injusto que es catalogarle como un equipo defensivo. El ataque del equipo azulgrana brilló con fuerza ante los vascos, el equipo más anotador de la competición europea, pero todavía lo hizo más ante el Covirán Granada, que llegaba al Palau como el cuarto mejor anotador de la Liga Endesa. Los de Sarunas Jasikevicius volvieron a sentirse muy cómodos aceptando la pelea en el mejor terreno del rival y dejaron casi resuelto el partido en una primera mitad para recordar (57-42).
Los primeros catorce minutos del Barça fueron una auténtica exhibición de clarividencia ofensiva y acierto en el tiro. A pesar de que Saras había decidido no alinear a su mejor anotador, Nico Laprovittola, al que dio descanso junto a Sertac Sanli y Álex Abrines, el equipo azulgrana encontró todos los caminos posibles hacia el aro rival, hasta el punto de que a falta de seis minutos para el descanso el marcador señalaba un espectacular 51-28 después de que los azulgrana solo fallaran un tiro de dos (13/14) y hubieran convertido los ocho triples intentados.
Todo eran buenas noticias. Kyle Kuric, titular, dejaba claro que su
largo parón por lesión ya está olvidado (14 puntos con cuatro triples sin fallo en el primer cuarto) y el mejor Cory Higgins volvía a aparecer como hizo el viernes ante el Baskonia para tomarle el relevo
con otros tres triples. Solo la temprana entrada en la rotación de los menos habituales como Michael Caicedo, James Nnaji o Mike Tobey, que debutaba en ACB con la camiseta azulgrana, y la explosión
anotadora del escolta del Covirán Thomas Bropleh (19 puntos en el segundo cuarto) mantuvieron vivo el partido al descanso (57-42).
El Covirán Granada acabó encajando cien puntos pero no puede decirse que hiciera un mal partido. Los andaluces nunca renunciaron a su estilo dinámico y valiente y, liderados por Bropleh y Felicio, llegaron a situarse a diez puntos a diez minutos del final (7666). A la que las rotaciones hicieron bajar la eficacia del Barça, el equipo de Pablo Pin estuvo ahí para plantar cara y confirmar las virtudes que le han hecho llamar la atención en este arranque de su temporada de debut en la élite.
Alguien incluso pudo pensar en algún momento que los visitantes le iban a complicar al Barça un partido que parecía sentenciado al descanso. Pero no fue así. Jasikevicius dio un par de gritos, su equipo se puso las pilas y la pista volvió a ponerse cuesta abajo para acelerar hasta los cien puntos