Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Tanta moral como el Alcoyano
➔ Los locales remontan un 0-2 adverso y Rego,en inferioridad numérica por expulsión de Eguiluz, firma el 3-3 definitivo a un suspiro del final
El Bilbao Athletic dejó patente en El Collao que tiene tanta moral como el Alcoyano. Los cachorros rescataron un punto en el tiempo de prolongación cuando jugaban en inferioridad numérica por expulsión, por doble amonestación, de su central Eguiluz. Rego aprovechó un balón suelto en el área local para firmar el empate a tres definitivo.
Un punto que supo a gloria en las filas bilbaínas, pese a que en el minuto 31 de encuentro lucía un 0-2 en el marcador. Los cachorros, a modo y manera de anteriores compromisos, carecieron de contundencia para hacerse fuertes atrás y asistieron a la remontada del Deportivo a falta de veinte minutos para la conclusión. Todo apuntaba a un nuevo 3-2 en contra lejos de Lezama cuando el centrocampista bilbaíno estableció las tablas.
La llegada de Álex Pallarés a Lezama ha servido, entre otras cosas, para poner fin a la larga sequía rea- lizadora de los rojiblancos. El filial del Athletic, que venía de hacer dos tantos a Osasuna y Cornellà con su nuevo míster, estableció ese mismo registro en una primera fase departido en la que Adu Ares se convirtió en el gran protagonista. El joven extremo del conjunto visitante, que en esta ocasión arrancó pegado a la banda izquierda, firmó dos tantos marca de la casa con la inestimable colaboración de Goti.
El Bilbao Athletic, pese al 0-2, perdió el control del partido en un abrir y cerrar de ojos. El Alcoyano, con un arbitraje que le permitió
emplearse a fondo a la hora de entrar e ir al choque, fue capaz de nivelar el marcador antes de terminar el primer tiempo. Moyita, tras una gran acción colectiva e individual, batió a Padilla y cinco minutos más tarde Juanan, uno de los centrales, firmó el 2-2 de cabeza.
Más difícil todavía
Los cachorros, esta vez con defensa de cuatro desde el pitido inicial y con un sistema más parecido al del primer equipo, no rindieron al mismo nivel durante la segunda mitad.
Los locales aprovecharon su superioridad territorial para ir acumulando ocasiones hasta que Soler, uno de los hombres de refresco introducido por Vicente Parras, firmó el 3-2 ante un sorprendido y sorprendente Padilla. El portero rojiblanco no parece estar atravesando por uno de sus mejores momentos.
Los problemas del Bilbao Athletic no terminaron ahí. Pallarés dio entrada primero a Jon Cabo, más tarde a Hugo Rincón y Rego y finalmente a Guruzeta y al debutante Varela, pero tuvo que recomponer líneas poco antes del minuto 90 por la expulsión de Eguiluz. Los cachorros, lejos de bajar los brazos, siguieron intentándolo y acabaron encontrando recompensa a su insistencia en la última jugada prácticamente del encuentro. Rego, listo y certero, evitó males mayores a tiempo al firmar el a la postre definitivo 3-3.
Los rojiblancos dejaron patente que tienen por lo menos tanta moral como el Alcoyano. Puntos, eso sí, unos cuantos menos ●