SE GANA EL PUESTO
El escolta estadounidense Jackson Capel responde con triples a la confianza del Gipuzkoa Basket Sus últimos partidos están propiciando una amenaza exterior importante para el equipo donostiarra
A Jackson Capel le faltan menos de diez días para conocer su futuro próximo. El escolta estadounidense ilustra bien a las claras lo que significa un ‘temporero’ en baloncesto, es decir, un jugador cuya continuidad en un club no está garantizada, que renueva su contrato de forma temporal y que se juega en cada lance de un partido su próximo destino profesional. En el caso de Capel, su recorrido por el Gipuzkoa Basket comenzó con un acuerdo para que el jugador únicamente se entrenara con el equipo de Porfi Fisac y esperar una oferta que le llevara a otro club, tras haber sido despedido por el Huesca a las primeras de cambio.
Capel llegó a la LEB Oro, al Huesca, este verano avalado por sus condiciones de jugador con muy buena mano. Sus anteriores experiencias europeas le situaban en la segunda división alemana, más en concreto en un equipo como el Eintracht Stahnsdorf, donde jugó muchos minutos y se convirtió en un buen anotador. Antes, en 2015, había militado en el Azuqueca de la Liga EBA española. Siempre ha sido un jugador especialista en el tiro, aunque en Alemania también ejercía de ‘jugón’. Evidentemente la segunda alemana es inferior a la LEB Oro por lo que Capel debía contrastarse en esta categoría para medir su progresión.
A sus 30 años, fue el Huesca el equipo que este pasado verano se fijó en él. Sin embargo, un inicio complicado del club aragonés, con malos resultados y poca producción de puntos, le llevó a prescindir del jugador estadounidense. Solo cuatro jornadas le dieron de tiempo, y es que a veces la paciencia no es la mejor virtud de los clubs. En cuatro partidos poco se puede demostrar, más cuando todavía no ha pasado ni el tiempo mínimo para adaptarse a una nueva ciudad, un nuevo baloncesto y unos compañeros desconocidos.
Y es aquí cuando Jackson Capel aterriza en Donostia. Su agente le pide a Porfi Fisac que le deje entrenar con el GBC mientras espera una nueva oportunidad. El jugador recala en el GBC como ayuda para los entrenamientos. Pasadas unas semanas Niko Skouen, temporero por aquel entonces en Gipuzkoa Basket, descontento con los minutos que juega, recibe una oferta del Zornotza de la LEB Plata, una oferta con contrato garantizado para lo que queda de campaña. El escolta noruego acepta y comunica al GBC sus deseos de cambiar de aires.
Para Capel es la oportunidad de demostrar que puede entrar en el ‘roster’ guipuzcoano. Fisac necesita tiro exterior y Capel tiene buena mano, aunque existen dudas de que pueda aportar en otras facetas del juego. Además, gasta la otra plaza vacante de foráneo que había dejado el entrenador para, una vez vistas las carencias de la plantilla en las primeras jornadas, poder reforzarse con un jugador de más calidad. No obstante, los intereses de las dos partes confluyen. Capel vuelve a jugar y el GBC suma un tirador a su grupo. Primero dos meses de contrato, después uno más. Y ahora la decisión definitiva antes del día 28 de este mes sobre si Capel se queda hasta el final o no se le prolonga su vinculación. El jugador viene progresando claramente en su juego, sobre todo en su acierto. Porfi Fisac le ha querido otorgar toda su confianza, lo incluye en el quinteto titular y cada vez juega más minutos.
Triples para la causa
Jackson Capel se está revelando como un jugador muy aprovechable en el último mes. Sus triples le están viniendo de cine a un GBC que tampoco cuenta con tiradores fiables al cien por cien. En el equipo de Fisac Lander Lasa es uno de los especialistas más allá de 6,75 pero quizá el único hasta la llegada de Capel. Carlson sería el otro pero su condición de ala-pívot le obliga a no desenvolverse tanto por fuera como un exterior. Después, otros jugadores como Uriz, Pino o Pardina pueden aportar buenos tiros desde lejos pero no son especialistas al uso. Es aquí donde entra Jackson Capel, autor hace dos jornadas de tres triples ante el Burgos, y cuatro bombas este pasado viernes contra el Cáceres. También aportó otras tres canastas de tres puntos en la última victoria del equipo en la cancha del Ourense. Lleva diez triples en los cuatro partidos más recientes. Una buena tarjeta de presentación.
Por si fuera poco, el estadounidense es un jugador cada vez más aguerrido en defensa. Implicado en el equipo, trabajador en los entrenamientos y muy asequible en la relación calidad-precio. Son sus principales argumentos para reclamar un puesto en la plantilla hasta el final de la temporada. Se lo está ganando