Una lucha desigual
Un boxeador que no ha perdido jamás contra un luchador de artes marciales mixtas (MMA) que nunca ha boxeado profesionalmente, y bajo reglas de puro boxeo tradicional. El Mayweather vs. McGregor, aparte de un negocio lucrativo del que se aprovechará más la UFC que el boxeo, es un experimento fácil de pronosticar: salvo accidente o sorpresa mayúscula, McGregor no puede ganar a ‘Money’. M ayweather no debería tener problemas. Primero, por su clase inmensa, quizás el mejor boxeador defensivo de la historia. Segundo, porque pelea ‘en casa’, bajo las reglas del deporte que siempre ha practicado. No tiene que luchar en el suelo, como en la MMA, no es un octágono sino un cuadrilátero con esas cuerdas que el americano sabe aprovechar tan bien. Tercero, porque es McGregor el que se aventura en un terreno que no conoce. El irlandés pega duro, no se puede negar, pero está acostumbrado a hacerlo con guantes de cuatro onzas y no de diez. Muchos de sus KOs en la UFC comienzan en la mala defensa de sus rivales, y Mayweather es todo lo contrario: si alguien tan contrastado como
Manny Pacquiao tuvo problemas para hacerle daño en el combate del siglo entre ambos en 2015, ¿cómo lo hará McGregor?. M e atrevería a decir que McGregor perdería no solo con Mayweather, sino con cualquiera de los boxeadores ‘top’. Es muy complicado aterrizar en el boxeo y marcar la diferencia, que es lo que se le pide al irlandés ante un monstruo que sigue invicto y que tiene una esgrima defensiva impecable. Eso sí: el escenario, las reglas, tienen en esta pelea un papel fundamental: si fuera Mayweather el que pelease bajo las reglas de la UFC, creo que lo tendría imposible para derrotar a McGregor. Pero será boxeo, y Floyd, aunque lleva dos años sin pelear, conoce su oficio y no dudo que se pondrá en forma a tiempo