Mahdavikia, como referente
Irán ve a Jahanbakhsh como la nueva esperanza de su fútbol
Antes de decantarse finalmente por el fútbol, Alireza Jahanbakhsh probó otros deportes en su ciudad natal, Jirandeh, una pequeña localidad con menos de 3.000 habitantes al norte de Irán. A los 12 años dio el paso adelante y creció en el club Damash Gilan, que lo hizo debutar a los 17 años.
Los goles de la clasificación para la histórica presencia de Irán en el Mundial de Francia 98 fueron de otros, pero Mehdi Mahdavikia se convirtió en su primer héroe del juego. Una decena de anotaciones en su equipo, además de sus destacadas participaciones con la selección Sub-19 en el campeonato asiático, lo pusieron en la mira del NEC de Holanda. Las puertas del futbol europeo se abrieron con un contrato por tres años en julio del 2013.
En su primera temporada marcó seis goles y dio cinco asistencias en 33 partidos. Estuvo cerca de ser nombrado mejor jugador joven. Sin embargo, el esfuerzo individual no bastó, ya el equipo descendió. El iraní hizo personal el reto y sus 12 anotaciones fueron fundamentales para regresar a la Eredivisie. Para ese momento, el talento de Alireza no había pasado desapercibido, especialmente su buen toque de pierna derecha y la capacidad asociativa, motivos que le llevaron a firmar en agosto de 2015 con el AZ Alkmaar.
Ganarse un puesto en el AZ no fue cosa fácil, en parte por una importante lesión de rodilla que demoró su presentación y que le tuvo mucho tiempo fuera de los terrenos de juego. Acumuló minutos poco a poco y en su tercera temporada, ya consolidado en el primer equipo como titular, ha sido el máximo goleador de la liga holandesa. No es alto, mide 1.80, y la velocidad no es su fuerte, pero sabe qué hacer cuando está frente al marco. 21 goles en 33 partidos es una cifra muy a tener en cuenta.
El sueño de su padre
Uno de sus recuerdos mundialistas tiene a su padre como protagonista. Durante Alemania 2006, le hizo saber cuál era su deseo: “Este es mi más grande sueño, verte un día vistiendo la camiseta de la selección en una Copa del Mundo”.
Jahanbakhsh estuvo en Brasil 2014 y desde entonces, la afición está a la expectativa de quien ahora comparan con su ídolo Mehdi Mahdavikia. Alireza jugó apenas 49 minutos y fue parte de un debut mundialista tan positivo que ha puesto alto el objetivo del técnico Carlos Queiroz: un paso más allá de la fase de grupos en Rusia. El miércoles le espera España
Ha superado una lesión importante de rodilla y está dando su mejor nivel