Mundo Deportivo

Talento heredado

Tom Digbeu sigue los pasos de su padre Alain y ya destaca en el cadete del FC Barcelona y en la selecció catalana

- El reportaje Vladimir Stankovic

Y con el número 11... Digbeu. ¿Digbeu? ¿Qué Digbueu ? ¿Alain ha vuelto jugar con más e 40 años? No... Se trata de otro Digbeu, su hijo Tom, escolta de 15 años, cadete en el FC Barcelona.

Encontré a ambos hace pocos días en el torneo junior de l´Hospitalet. Papa Alain asistió como ojeador de Atlanta, Tom como un espectador mirando el prestigios­o torneo en que jugará dentro de uno o dos años.

“Por supuesto que estoy contento que mi hijo siga mis pasos y juegue a basket... No puedo ser objetivo por completo, como cualquier padre, pero diría que tiene talento y potencial”, explicaba Alain, que fue un escolta de 1,95 formado en el ASVEL y destacado a principios de la pasada década en Barça, Madrid y Joventut, entre otros.

Su hijo, nacido el 24 de septiembre de 2001, ya casi iguala la estatura de su padre con apenas 15 años. “Me superará bastante, creo que llegara a 2,03 o 2,04 metros”, dice Alain. “Puede ser un buen alero”.

El chaval no habla mucho. Se muestra tímido, pero también respeta la regla del club que impide a los menores de edad conceder entrevista­s. Le pregunte quién es su ídolo y tardó antes de contestar con una palabra: “Harden”.

Cuando le pregunto por Michael Jordan su padre contesta por él: “Es demasiado joven, no ha visto el gran Michael en directo. Sólo por videos, por eso los jugadores en que se fija son los que juegan en la actualidad”.

Tom Digbeu vive solo en Barcelona. Sus padres, separados hace años, están en Alicante (la madre) y Estambul (el padre). Alain intentó trabajar como entrenador y hace dos años dirigió en el torneo de l’Hospitalet a los juniors de Galatasara­y, pero ya no forma parte de staff técnico de este club.

“Me fui muy decepciona­do ...No hace falta hablar de detalles y personas, pero es una página cerrada. De momento estoy contento con lo que tengo con Atlanta, pero sigo con la idea de ser entrenador y espero una oportunida­d”, explica.

Su hijo Tom ha crecido en Ali- cante donde Alain pasó parte de su carrera española. Digbeu senior jugó también en el Real Madrid y Joventut, en total unos 230 parti- dos en ACB. Tom tiene la doble na- cionalidad, francesa y española, y podrá elegir selección nacional. No hay decisión tomada, pero lo que dice su padre es indicativo: “En Francia nadie conoce a Tom”, asegura Alain.

El chaval ya jugó en la selección catalana que participó en el reciente campeonato de España ca- dete, en Huelva, donde contribuyó a la conquista de la medalla de pla- ta con medias de 7,8 puntos.

Alain está contento de que su hi- jo fuera llamado por el Barcelona, club en que él jugó tres años. De esa etapa en Barcelona Alain tiene buenos recuerdos: “El mejor , sin ninguna duda, fue la liga ganada en 2001. Fue una fi- nal espectacul­ar con la aportación de un jo- ven Pau Gasol cuyo enorme ta- lento se ha- bía visto desde el principio. Quizá los momentos más tristes fueron los del año siguiente, cuando perdimos la final de la Copa del Rey en el último se- gundo y en semis de la ACB, en ambas ocasiones ante el Tau Cerá- mica”

“Como padre no puedo ser objetivo pero creo que tiene potencial”, dice Alain

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FOTO: FC BARCELONA Acción ofensiva de Tom Digbeu en un partido con el cadete del Barça. El alero muestra muy buenas condicione­s físicas
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FOTO: P. LARGO Tom y Alain, hijo y padre en una pausa del torneo de l’Hospitalet

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