Suma y sigue arbitral en 2017
La falta de Koke a Suárez en el gol del Atlético, décimo error grave que perjudica al Barça en el inicio de año
Aunque en los últimos partidos de 2016 también hubo decisiones arbitrales que perjudicaron al Barça, como el gol válido anulado a Piqué ante el Málaga (0-0) o el penalti de Hugo Mallo no pitado a Neymar en los últimos minutos en Balaídos (4-3), por hablar de los que tuvieron incidencia en el marcador, se entendieron como situaciones que pueden ocurrir en el mundo del fútbol y que se explicaban con el viejo tópico de ‘unas veces te dan y otras te quitan’. De hecho, el equipo azulgrana salió beneficiado en Liga en Anoeta (1-1) porque a Juanmi le invalidaron un gol legal. Eso sí, al Barça solo le supuso sumar un punto de más (+1) por el empate final, mientras que el error arbitral ante el Málaga le impidió contar con dos más (-2). Para las comparaciones...
Sin embargo, para lo sucedido entre el 5 de enero y el 1 de febrero de 2017, ambos inclusive, ya no hay tópico amable que pueda ser aplicado. Han sido 28 días de auténtica antología del disparate arbitral, con fallos tan clamorosos que la realidad superaba la supuesta gracia del ‘meme’ posterior en las redes sociales.
El último tuvo lugar el miércoles en el Vicente Calderón, con el clarísimo agarrón de Koke a Luis Suárez en el gol que dio vida al Atlético en el partido y la semifinal de Copa. El uruguayo no pudo disputar el salto a Godín y su prolongación de cabeza la aprovechó Griezmann (1-2)..
Fue increíble que el propio Koke acabara el partido sin amarilla pese a sus tres faltas de tarjeta: el agarrón y dos duras entradas a Neymar.
Ese ha sido el último episodio, pero 2017 arrancó el 5 de enero en Copa en Bilbao (2-1, ida de octavos) con el penalti descomunal y no señalado por el andaluz Fernández Borbalán de Etxeita a Neymar y una agresión sin balón de Aduriz a Umtiti no castigada. Al lado de dos disparates mayúsculos, el penalti claro que recla- mó Piqué por la salida a destiempo de Iraizoz quedó empequeñecido.
Lo del 8 de enero en Liga en ante el Villarreal (1-1) ya fue un chiste malo del gallego Iglesias Villanueva. La estirada de Bruno a ras de césped para tapar con la mano el tiro de Messi no la imaginaría ni un guionista si quisiera hacer una parodia de penaltis no pitados. Hubo otra mano de Bruno, quizás accidental al caer, que se compensa con la involuntaria reclamada a Mascherano.
El 11 de enero (vuelta de 1/8 de Copa, 3-1 al Athletic), el extremeño Gil Manzano anuló un gol legal a Luis Suárez por fuera de juego inexistente de Neymar. El Barça pasó y apenas se habló de ello, pero pudo costar el KO en Copa.
En Anoeta (ida de cuartos de Copa, 0-1 a la Real, 19 de enero), el castellano-leonés González González no pitó un penalti incuestionable de Rulli a Neymarni otro por manos de Navas en disparo de Piqué. La Real pidió la segunda amarilla de Messi, agarrado, placado, golpeado con el juego parado y zancadilleado sin amonestaciones para los locales.
Medio metro de gol
Pero lo más gordo, al nivel de las manos de Bruno, estaba por llegar. El gol que no subió al marcador en el Villamarín pese a que el balón entró medio metro ha dado la vuelta del mundo, con penalti de libro de Mandi a Neymar en la misma jugada en un partido que acabó 1-1. El canario Hernández Hernández pasará a la historia. Gracias a él llegará el ‘ojo de halcón’ a la Liga... algún día.
Pese a los errores arbitrales en la Copa, el Barça, aunque más fatigado por la exigencia de marcadores ajustados que pudieron ser más cómodos, ha ido superando rondas y tiene en su mano el pase a la final, pero en Liga dejó de sumar 4 puntos en este 2017 que se suman al -2 de 2016. Y un -6 puede costar una Liga
La ‘parada’ de Bruno y el gol fantasma en el Villamarín lideran la lista de disparates
Neymar ha sufrido tres clarísimos penaltis de Etxeita, Rulli y Mandi no señalados