Seguimos vivos
Hace una semana, en el Bernabéu, minuto 92, la Liga estaba prácticamente decidida. Instantes después, ya se sabe, el gol de largo recorrido, en todos los aspectos, Sergi-Roberto-Gomes-Alba-Messi, lo cambia todo. Sin este gol las cuatro semanas hasta la final de la Copa (27 de mayo) hubieran sido un sinvivir. El nombre del nuevo entrenador, sus pros y contras, filtraciones, a mí me han asegurado, esto va a ser un desastre, aquel se tiene que ir, palos a los fichajes -los últimos ocho analizados uno a uno-, quién es el responsable, que cuánto ha invertido, o cuánto hemos perdido en estas contrataciones, que la junta esto o aquello, que los problemas judiciales, que la plantilla, los cracks, se están envejeciendo…, y así más de 20 días, tertulias de radio y televisión. ¡Ah! Y muchos posibles fichajes. El Barça ha contactado con…, tiene el ‘ok’ de…, este aquel, el otro, van a ser cedidos o traspasados. Y dale, y dale, y dale. Bueno pues aquel gol ha cambiado el destino inmediato del equipo. Y ahora la rosca está en quién va a ganarlo todo. O los del Barça o el Madrid van a tropezar, quién lo tiene más fácil. Y muchos recuadros con los partidos que le faltan a uno, que si en casa, que si fuera, que si el Real tiene las semifinales de Champions League contra el Atlético -a nosotros ya nos gustaría pero no pudo ser- y así hasta llevar al atento seguidor a la locura pensando en matemáticas y haciendo cuentas de la lechera para conocer el campeón.
Mientras volviendo al Bernabéu, el sábado, a primera hora de la tarde, porque “es que el Valencia ha mejorado mucho” y “es que el A del Madrid tropieza mucho en casa”, y estuvieron a punto. Cuando Cristiano cabeceó a gol, ya está, no pudo ser. Cuando el árbitro pitó un penalti que solo se pitan a favor de los grandes, más si el grande va de blanco. Pongo una película. Pero ahí estaba el parador Alves, todo un especialista en la materia, y, bueno, aún es posible. El Real empieza a jugar a lo suyo, a casi nada.
Casemiro hace una falta innecesaria, esto también es fútbol y este chico está muy aficionado a estas entradas a destiempo.
Parejo tira de forma magistral con la derecha, a lo Messi-Neymar, y empate. ¡Ah! ¡Cuidado! Es el Real y claro, un defensa, en este caso Marcelo, le salva la papeleta, una vez más. Un rato de descanso y para Cornellà-El Prat. Ambiente de gala. Los locales crecidos, público entregado. En el palco, excelente relación que había empezado horas antes en el RCT Barcelona, con la comida de directivas en el Godó y con Beto Agustí multiplicándose como anfitrión de primer nivel. Sobre el terreno,
Jurado, jugador clave en este partido, desgraciadamente para los pericos, en este encuentro, solo ante Ter Stegen, la tira fuera. Luego, primera parte, los porteros ignorados, sin tocar balón y convirtiéndose en casi dos espectadores más. La continuación trajo a un Barça más activo e incisivo. Una apretada a Jurado en su banda derecha provoca que el blanquiazul se le ocurra hacer un pase atrás, Suárez lo ve, caza el balón y fusila a Diego López .Se acabó lo que se daba. Cayeron dos más, pudieron ser más. Se acabó el derbi. Seguimos vivos. Adelante en las tres finales que le restan al equipo para poder levantar el trofeo de campeón por séptima vez en los últimas nueve temporadas
La victoria en el Bernabéu permite al Barça seguir soñando con el título de Liga