Hamilton perdona pero no olvida
El paisaje bucólico, verde y tranquilo que rodea el circuito de Spielberg parecía el lugar adecuado para que Hamilton y Vettel resolvieran sus diferencias después de su enfado en Bakú. Y así fue. Ayer, en la rueda de prensa previa al GP de Austria de F1, el germano agachó la cabeza y asumió toda la culpa de lo sucedido en Azerbaiyán, después de ser perdonado por la FIA por enésima vez. A Lewis no le quedó otra que aceptar las disculpas, mostrándose muy frío, asegurando por un lado que lo de Bakú no harán que actúe diferente en su lucha con el teutón, pero que las palabras del alemán no cambian nada de lo que pasó hace dos semanas.
“¿Si fue un golpe deliberado? Me sorprendí. Tenía la impresión en ese momento, que luego corregí, que estaban jugando conmigo. Me puse a su lado. Reaccioné por encima de lo necesario y creo que se vio lo que ocurrió, no creo que tenga que explicarlo más”, expresó el germano, que quiso que quedara muy claro que dentro del coche tenía una visión muy distinta del comportamiento de Hamilton en régimen de safety car, algo que le provocó su enfado.
El germano desveló además que, al darse cuenta de su error, no dudó en llamar al de Stevenage y pedirle disculpas. “Le dije a Hamilton que no quería hacerle daño. No intenté darle un puñetazo. No era mi intención hacerle daño a su coche porque íbamos muy lentos. Pero mirando lo sucedido, no era necesario”, argumentó Vettel, que primero se puso en contacto con su rival a través de mensaje, como explicó Lewis, y luego charlaron por teléfono para aclarar la situación. “Sólo quería decirle a Sebastian que no le frené a propósito, y quería decírselo porque la gente que lo vio por televisión pudo pensar que fue así, pero en la telemetría quedó claro. Fue un error suyo, no había necesidad de que hiciera algo así porque yo estaba liderando”, comentó Hamilton, satisfecho de que ‘Seb’ reconociera que “no le frené a propósito”.
“¿Por qué no le dije nada tras la carrera? Estaba muy ocupado, y tras la carrera todos tenemos nuestras reuniones, y no creo que fuera el momento de salir del coche e ir a hablar con él”, recalcó el de Ferrari, que cree que la sanción recibida por su actitud en Bakú fue suficiente debido a que pudo perder muchos puntos respecto a Hamilton si no fuera por los problemas que el británico
tuvo con su reposacabezas.
Lewis no da marcha atrás
Mientras Vettel reaccionó por su actitud y reconoció sus errores, Lewis no se arrepintió de las palabras que pronunció tras el GP de Azerbaiyán, en las que invitaba al alemán a encontrarse fuera de la pista para resolver sus diferencias. El británico no cree que hiciera nada malo con su reacción de ‘gallito’ y aclaró que “no siento que dijera nada por lo que tendría que arrepentirme”.
El británico y el germano firmaron ayer de esta forma un tratado de paz que podría romperse en cualquier momento debido a la gran igualdad que hay en la lucha por el título y la tensión existente entre ambos en pista. De momento, ambos se centran en la carrera de este fin de semana. Eso sí, pese a las disculpas del germano, Hamilton expresó que “mi opinión sigue siendo la misma. Lo que pasó sigue siendo igual”. Lewis perdona pero no olvida, y ya piensa en devolverle el golpe de otra forma, con un triunfo en Austria que apriete todavía más el presente Mundial
Sebastian Vettel
Le dije a Hamilton que no quería hacerle daño Íbamos muy lentos”
Fue una decisión incorrecta, me sancionaron en carrera y perdí una victoria potencial”
Lewis Hamilton
No hay tensión entre nosotros. Lo hablamos por teléfono y seguimos siendores etuosos”