Una victoria que hace justicia

Boasson Hagen se impuso en solitario tras acariciar la gloria varias veces

A la quinta fue la vencida debió pensar el noruego Boasson Hagen, cuando a falta de unos 700 metros decidió saltar del grupo de los escapados a la búsqueda de la victoria en la 19ª etapa del Tour de Francia, la más larga de la edición 2017, 222,5 kilómetros, con la salida en Embrún y la llegada en Provenza. Después de ser segundo en dos ocasiones y de ser tercero en otras dos, por fin el integrante del Dimension Data logró imponer su calidad en una etapa marcada por la enorme fuga de 20 corredores que se formó a falta de 120 kilómetros y por la nula trascendencia que tuvo el día entre los favoritos, que se limitaron a cumplir el expediente y llegar a meta a la espera de lo que pueda suceder en la decisiva contrarreloj de hoy. El devenir de la etapa empezó a aclararse cuando a 13 kilómetros de meta el grupo cabecero se partía en dos, formándose una primera unidad con nueve corredores (Bakelants, Albasini, Boasson Hagen, Keukeleire, Arndt, Chavanel, Gesbert, Bennati y De Gendt), de entre los que Boasson Hagen iba a ser el más listo de la clase.

A falta de 700 metros lanzó su ataque. Todo fuerza y poderío se benefició del final enlazado de curvas y de las dudas iniciales entre sus compañeros de aventura para ir ganando unos metros que al final serían suficientes para lograr su tercera victoria en el Tour de Francia, tras las dos de 2011. El pelotón entró ordenado, en formación, a cámara lenta, a 12’37” del ganador, antes de pasar al modo ‘on’ en la CRI de Marsella, que acabará de definir las posiciones de privilegio de la ronda gala