Mascherano no baila ‘Salsa Choke’
El Jefecito ha dado un rendimiento excelente al Barça, ahora le toca a Yerry Mina inventar un nuevo paso
CJ Castro sólo quería innovar, crear un ritmo diferente que definiese a la gente de Tumaco. Mezcló ritmos de rap, electrónica, la esencia del Pacífico, el baile tenía mucho de salsa, conga, campana de bongo. ‘Chichoki’ salió de ese experimento y decidió repartir 50 CD’s entre los taxistas de su pueblo para que se fuera escuchando esos ritmos nuevos. Tal fue el éxito que este enfermero brillante decidió dejar el hospital en el que trabajaba para mudarse a Sultana del Valle para seguir componiendo. Corría el 2008.
Carlos Mosquera, uno de los grandes productores musicales de Colombia, le puso nombre a ese ritmo ‘Salsa Choke’ y empezaron a salir grupos como Integración Casanova, Son de Aka, 3 Corazones, Los Traviesos hasta que en el Mundial del 2014, tres de los jugadores más bailongos de Colombia (Armero, James Rodríguez y Cuadrado) se marcaron un baile siguiendo los compases del ‘Ras Tas Tas’ de Harrison que dio la vuelta al mundo. El ‘Salsa Choke’ se hacía internacional y ahora Yerry Mina es su mejor embajador, porque el central con alma de goleador que fichará el Barça no deja pasar la ocasión de aprender nuevos pasos y mostrarlos en cada una de sus celebraciones.
No piensen, los nombres de los pasos sensuales tienen su guasa: champú, saltadito, pateando el balón, calor... La clave es mover muy bien las caderas, algo a lo que nos tiene muy acostumbrada la colombiana más ilustre del entorno blaugrana, la cantante Shakira, pareja de Piqué, que si todo sigue le evolución diseñada por el Barça pasará a tener doble pareja colombiana, en casa y en el centro de la defensa.
Yerry Mina es un tipo extrovertido, divertido, que ha puesto a bailar al Palmeiras y les ha transmitido una energía vital descomunal. Justo lo que necesita el vestuario del Barça.
A Mascherano no lo veo bailando el ‘Salsa Choke’. El Jefecito ha dado un rendimiento excelente al Barça pero ya hace tiempo que sabe que ya no está al nivel de un equipo referente en el mundo. Nadie más crítico con su estado de forma que el mismo futbolista. Quizá no tendría que haber renovado por el Barça, si hubiera escuchado a su cabeza habría aceptado alguna de las ofertas que le llegaron en verano y habría dejado el club. Pero el corazón le pidió seguir un poco más al lado de Messi, de Luis Suárez ,de Iniesta, en casa, con su gente perfectamente aclimatada a la vida en Barcelona.
El Jefecito hará bien marchando en el mercado invernal aunque el club le pida la misma generosidad que tuvo la entidad a la hora de renovarle. Masche vivirá la experiencia de China antes de engancharse al Mundial de Rusia. Y quizá vuelva a Barcelona para trabajar en La Masia donde los valores del argentino merecen una posición de honor. Pero ahora toca contagiarnos del ritmo de Yerry Mina, esa ‘Salsa Choke’ que promete