tercer tiempo Mar ya está haciendo historia en el rugby
Mar Álvarez (Jaén, 1973) no se considera a sí misma una pionera, aunque lo es. Es la preparadora física de la selección española de rugby que se juega mañana en Bélgica estar en el Mundial de Japón 20 años después y es la única mujer en un cuerpo técnico de todas las selecciones. “La verdad es que no me lo planteo así. Evidentemente para mí es un orgullo formar parte, pero no por ser mujer, sino por mi trabajo y la oportunidad que tenemos todos de hacer historia y volver a estar en un Mundial. No me paro a pensar tampoco si estoy abriendo paso o no, pero sí que noto que esto está cambiando y cada vez me encuentro a más mujeres en los cursos de preparación”, asegura.
Ha vivido esta semana previa al partido con gran alegría, “entusiasmada es la palabra”, apunta, pero plenamente concentrada para no desperdiciar una ocasión única: “En el staff estamos controlando todos los aspectos porque después de la victoria frente a Alemania lógicamente se desató la euforia y en el entrenamiento del lunes estaban muy dispersos. El miércoles sin embargo ya fue perfecto. Dividimos el entrenamiento en tres partes, los primeros 30 minutos de ejercicios de lucha, luego gimnasio y más tarde en el campo y les he vi a todos muy serios, muy metidos únicamente en el partido contra Bélgica”.
El seleccionador Santi Santos, que apostó por ella hace cinco años, no ha dejado nada al azar: “Está claro que hay jugadores más emotivos que otros, pero Santi repite una y otra vez que hay que estar con los pies en el suelo y hemos estudiado bien al rival. Por ejemplo, ahora ya sabemos en qué campo vamos a jugar, pero había tres opciones y los habíamos analizado todos; la anchura, longitud, el tipo de suelo, si era más o menos rápido. También las jugadas características de Bélgica. Estamos preparados”.
Del baloncesto al rugby
A Mar Álvarez le encanta el baloncesto. Fue el primer deporte que practicó “aunque él no me quería a mí”, ríe, y lo primero que se ve al entrar a su casa en Valladolid, donde también es segunda entrenadora y preparadora física de El Salvador, uno de los clubes más importantes de rugby en España, es un póster gigante de Lebron James. “En el baloncesto duré poco y empecé a practicar atletismo, los 400 y 800, hasta que a los 19 años tuve una lesión de rodilla y probé el hockey hierba”. Fue entonces cuando cambió todo porque además había comenzado a estudiar Educación Física y cuando probó el rugby fue amor a primera vista: “Ya no digo practicar, sino vivir un deporte de equipo es lo mejor. Y el rugby es para mí el deporte de equipo por excelencia. Es muy rico, cambiante, tiene un reglamento complejo pero al mismo tiempo fácil y para un preparador físico es un sueño porque te obliga a combinar la resistencia, la fuerza, la velocidad y las capacidades cognitivas”. Empezó jugando en la Facultad y el Granada fue su primer equipo profesional. De ahí pasó al Cisneros y más tarde al Ingenieros Industriales de Las Rozas donde jugaba en el equipo femenino y entrenaba al masculino. Desde el 2009 tiene el título de entrenadora y se ha licenciado también en Ciencias de la Actividad Física. Hace cinco años, siendo Directora de Formación en el CAU Metropolitano le llegó la llamada de Santi Santos. “Y no me lo pensé, claro. Poder ser la preparadora física de la selección era una oportunidad única, el mejor entorno donde crecer. Era algo que no podía dejar escapar”, explica. Desde el 2015 compagina su trabajo en la selección con el de ser la segunda entrenadora y preparadora física de El Salvador de Valladolid y dirige además un grupo de entrenadores personales, marcando.net. No para, vamos.
Romper los estereotipos
Tradicionalmente el rugby se ha considerado como un deporte masculino, pero los estereotipos hace tiempo que se han resquebrajado. En nuestro país, por ejemplo, la selección femenina acaba de ganar su sexto Europeo, el cuarto desde el 2010, y pide paso para volver a disputar el Seis Naciones porque méritos han hecho de sobra. Ahí está también la granadina Alhambra Nievas, la mejor árbitro del mundo y la primera en dirimir el año pasado un encuentro de selecciones masculinas, el Finlandia-Noruega.
“La competitividad, el liderazgo y la autoridad no tienen nada que ver con los géneros, sino con la capacidad, el trabajo y el esfuerzo”, reivindica Mar Álvarez. “Yo, claro, como todas las mujeres me he encontrado de todo en mi carrera, con comentarios que prefiero olvidar porque me gusta más recordar que en general he tenido el apoyo de mis compañeros con los que he trabajado y sigo haciéndolo codo con codo. Ahora, por ejemplo, no trato de mandar ni imponer a los jugadores, sino de negociar, saber qué necesita cada uno y ser así capaz de exprimir sus virtudes y no me he encontrado ninguna oposición”. Mañana ‘los leones’ pueden hacer historia 20 años después si se clasifican para el Mundial de 2019. Y Mar Álvarez es, por ahora, una excepción al formar parte del cuerpo técnico “pero algo está cambiando y va a seguir cambiando, estoy segura. Es el momento”
Es la preparadora física de la selección masculina que se juega mañana en Bélgica ir al Mundial
Desde 2015 compagina su trabajo con el de segunda entrenadora de El Salvador de Valladolid