El City activa las alarmas
El Crystal Palace sorprendió al campeón de la Premier y premió la trayectoria de un Liverpool invicto
A veces el fútbol se vuelve impredecible, capaz de dar sorpresas como la del Crystal Palace ante el City. Un resbalón inoportuno del campeón de la Premier, señalado en Manchester por el cuadro de Hodgson. Se resiste el veterano técnico inglés a jubilarse, aún con lecciones por dar, también a un Guardiola que aceptó la derrota a regañadientes tras una actuación que dista mucho del nivel que acostumbra a mostrar el City.
Tan solo el Liverpool presume ahora de estar invicto, líder consolidado de la Premier con cuatro puntos de margen sobre el City, que no le quedan comodines: “No tienen defectos”, afirmó Klopp sobre su inmediato perseguidor, nada claro si su afirmación tenía más que ver con la convicción o con la estrategia. Sea como fuere le funcionó al alemán, que dirige a un Liverpool inquebrantable a poco para llegar al ecuador de la temporada.
Síntoma de la fortaleza y la madurez que ha adquirido para combatir a un City que gobernaba con mano de hierro la Premier, todavía favorito a pesar de los recientes tropiezos en Stamford Bridge y en el Etihad. Aunque no le quedan balas en la recámara a Guardiola, con las visitas a Leicester y a Southampton como exámenes finales. Máxime porque después recibe al Liverpool en el primer encuentro del 2019, quizás decisivo en una temporada en la que cada error se magnifica.
Un City desnaturalizado
Nada se puede dar por descontado a estas alturas, penalizado el City por un Crystal Palace cuya situación en la tabla engaña. Un equipo experimentado y trabajado a nivel táctico, convencido de las instrucciones de un Roy Hodgson que ya puso en problemas a Mourinho en Old Trafford. Esta vez lo hizo en el Etihad ante
El City se ha quedado sin margen de error y recibe al Liverpool en tres jornadas
un City que extrañó a David Silva, falto de la electricidad y el desborde habitual de Sané o Sterling.
No le funcionó a Pep el invento de situar a Stones como pivote ante el Palace, empecinado en dar con solu- ciones de emergencia en partidos menores. Ya no hay de esos ni para el City, que se despistó en el momen- to menos esperado. A las puertas de Navidad, agitada por Hodgson, que llegó a Manchester a generar el caos y, de paso, premiar la trayectoria de un Liverpool ávido por alzar la pri- mera Premier de su historia