Tercer doblete de Marcelo Hirscher en Adelboden
Ha dado muestras de saber llevar la presión en múltiples ocasiones y ayer lo volvía hacer en uno de los escenarios que más le gusta. Después de pasar a la segunda manga con el tercer mejor tiempo, en la bajada decisiva Marcel Hirscher se transformaba y una vez más demostraba de lo que es capaz al lograr el mejor tiempo de todos los esquiadores y lograr la segunda victoria en dos días en Adelboden (Suiza), esta vez en el slalom, en el tercer doblete que lograba en este escenario tras los de 2012 y 2018. Un triunfo que logró ante 30.000 espectadores en un estadio de Chuenisbärgli muy complicado y bajo una intensa nevada y que lo consolida al frente de la clasificación del SL y de la general de la Copa del Mundo, además de dominar el gigante. La de ayer era su victoria número 67 en la Copa del Mundo de Esquí Alpino tras 235 participaciones, la novena de la temporada, la cuarta en SL. Al acabar la prueba le preguntaban por las claves de su victoria y él, jadeante todavía tras el esfuerzo, decía: “Ha sido una locura y he ido a ‘full gas’. Adelboden es un lugar muy especial para mí“.
Tras él se clasificó el joven Clement Noel (Francia) que lograba su primer podio en la Copa del Mundo y un resignado Henrik Kristoffersen, que de nuevo cometió demasiados errores en los momentos decisivos como para aspirar a derrotar a Hirscher. Peor le fueron las cosas al austríaco Marco Schwarz. Acabó la primera ronda con el mejor tiempo, pero en la segunda, tal como le pasó en Zagreb (Croacia) falló y no llegó a la línea de meta.
También compitió ayer Joaquim Salarich, en la que era su segunda Copa del Mundo de la temporada. El menor de los Salarich remontó 14 posiciones, pero no le bastó para pasar ronda. Él se mostraba satisfecho de su concurso a la espera de una nueva oportunidad. “No estoy disgustado. Creo que he esquiado bastante bien algunas partes y otras como el muro me han costado. Toca seguir adelante y buscar en Wengen (Suiza) estar entre los 30 mejores”