“En el Barça se explota a los 24 años”
Albert Puig, ex coordinador de la cantera azulgrana, entrena ahora al Niigata en Japón
→ Albert Puig dejó el Barça en 2014 tras nueve años en la cantera, donde llegó a ser el coordinador. Actualmente, a sus 51 años, el técnico de Cambrils vive su primera experiencia como primer entrenador en Japón, donde entrena al Albirex Niigata, líder provisional de la J-2 League, la Segunda División. Allí la liga se paró tras el primer partido por culpa del coronavirus, aunque el confinamiento en el país asiático es más permisivo. “La gente aquí es muy ordenada y obediente y se ha mantenido muy estable. Los colegios sí están parados, pero podemos salir a la calle y los comercios y restaurantes siguen abiertos”.
Siguen entrenando y los fines de semana juegan amistosos, manteniendo la dinámica competitiva. Pero
como a todos, el virus truncó sus planes. Eso sí, sigue con la ilusión intacta ante su primera aventura al frente de un equipo profesional. Salió del Barcelona con ganas de invertir más tiempo en la familia y decidió vivir experiencias con los suyos por el mundo a través del fútbol. Primero fue Gabón, después California y hasta el año pasado fue el segundo de Domènec Torrent en el NYCFC de la MLS.
“Quería probar ser primer entrenador, pero tenía muy claro que quería que fuera en una liga donde hubiera mucho de respeto. Odio la falta de respeto y en el fútbol esta lleno. Con Dome había aprendido mucho: Organicé las ideas de un equipo profesional, del día a día, que es lo que me faltaba”. Dio voces y a la semana el presidente del Niigata Albirex estaba en Nueva York para cerrar el acuerdo. “Soy el primer entrenador extranjero, una apuesta para ellos y vivimos encantados. Además, modificaron todo el staff en base de que yo estuviera contento. Solo puedo hablar maravillas. Ojalá se lo pueda devolver con el ascenso”, cuenta Puig.
Desde Japón, sigue al Barcelona y su cantera. En especial al filial, donde ahora juegan muchos de los futbolistas que él reclutó. “Me gusta el talento de Riqui, la fescura de Ansu, la calidad de Collado. Iñaki Peña es un porterazo, Ilaix mezcla un gran talento con un físico muy potente...”. Son algunos ejemplos. “Estos son los mejores de su generación, tienen un talento especial y hay que aprovecharlo, son los que tienen que llegar. El nivel de implicación de los de casa es muy superior a los que vienen de fuera por muy profesionales que sean”, recuerda.
A pesar de vivir en un mundo y una generación que lo quiere todo aquí y ahora, Albert Puig insiste en que hay que creer y tener la paciencia. “Hay que esperar a la edad propicia, hasta los 24, cuando explotan”. Porque para el ex coordinador de la cantera culé el jugador de La Masia se hace a fuego lento.
“Siempre hay que tener un control sobre el talento”, avisa Puig, que subraya: “Si se quedan, tienen que jugar. Si no, en el periodo de 18 a 24 años hay que cederlos y que pasen por diferentes estilos de juego. Como Aleñá en el Betis. En las cesiones se formarán y se podrá ver si realmente valen. Si después no sirven para el primer equipo, ya tendrán experiencia en el fútbol profesional y lo podrán vender y sacar rendimiento económico”, concluye ●
“La generación que viene en el Barça tiene un talento especial. Tienen que llegar”