SUMA Y SIGUE EN LIGA
→ El Barça cumplió en Elche y consiguió el quinto triunfo consecutivo fuera de casa → Ter Stegen evitó sufrimientos y marcaron De Jong y Riqui Puig, tras gran acción de Frenkie
Un Barça más solvente que brillante cumplió en Elche y mantiene el tipo en Laliga. Son ya cinco desplazamientos seguidos con triunfo en el torneo de la regularidad y el conjunto barcelonista volvió a la tercera plaza de la tabla. Faltó brillantez, sí, pero no seriedad ni rigor para asegurar los tres puntos con tantos de De Jong y Riqui Puig, a centro del holandés en notable acción personal ya en los últimos coletazos del choque. Tras un primer tiempo gris, el Barça fue a más en la segunda parte ante un rival muy defensivo, que sin embargo dio el susto de rigor: Ter Stegen fue un día más decisivo al salir ganador de un mano a mano con Rigoni en la única gran ocasión de la tarde para los ilicitanos.
El gol de De Jong, que acabó de impulsar al fondo de la portería, llegando desde la segunda línea un balón que ya entraba, mal rechazado por el defensa Diego González tras un centro de Braithwaite, resolvió un primer tiempo de dominio plano, sin grandes chispazos, bastante soso. El Barça tuvo la pelota casi siempre, pero sin sentirse cómodo en la escasez de espacios que dispuso el Elche al defender prácticamente con nueve: un 4-5-1 con los ocupantes de las dos bandas de su línea de centrocampistas convertidos en quinto y hasta sexto defensas: Rigoni, teórico segundo punta en la hoja de alineaciones, se ocupó de tapar las subidas de Mingueza y de explotar alguna pérdida del lateral, como una que casi pagó muy caro el Barça, y Josan, en la izquierda, estuvo más pendiente de tapar a Alba que de subir.
La respuesta local se limitó, en el primer acto del partido, a un detalle técnico remarcable de Boyé, al dejar de tacón para la subida de Rigoni, que chutó sin consecuencias, y a un disparo de Josan por el otro extremo, después de que el conjunto barcelonista ya se hubiese puesto por delante en el marcador.
Ese amplio dominio del Barça tuvo en realidad poco rédito en cuanto a ocasiones de gol: acciones de Griezmann o de Braithwaite, que jugó por la izquierda, marcado con gran dureza por Barragán, y sobre todo en un chut de Alba en una subida o en un remate lejano de Busquets cuando recibió tras internada de Dembélé y combinación con Pedri, clarividente un día más.
Poco bagaje en cuanto a ocasiones, o esbozos de ocasión, para el Barça en el primer tiempo, con Dembélé como mejor baza ofensiva al ser el único que trataba de sacudir la zaga ilicitana, pero con ese desorden suyo tan entrañable y exasperante a la vez: nunca conoces el desenlace de la cosa. Puede acabar en rotura de la línea defensiva o en pérdida grotesca. Así es Dembélé. Y, de hecho, fue quien aportó profundidad, por dentro en la primera parte y pegado a la banda, para desordenar la defensa, en la segunda.
El susto del día
Una pérdida de Mingueza ante Rigoni, tras un pase muy arriesgado de Umtiti, sorprendente titular al lado de Araujo, forzó a Ter Stegen a una gran intervención con el pie en el uno contra uno y revolucionó el partido: acto seguido, Dembélé ponía a prueba a Edgar Badia tras recibir de Pedri. Las dos acciones consecutivas, sobre todo, trajeron consigo un paso adelante del conjunto local para tratar de competir el partido, pero un Barça concentrado mantuvo la compostura.
Pizarro Gómez (el señor colegiado) interpretó como involuntarias dos manos en el área del Elche en la segunda mitad. Ya no se sabe cuándo se pitan las manos y, ayer, tocaba interpretar la voluntariedad. Otro día, si Piqué por ejemplo es quien da con la mano, pues ya cambiaremos el criterio. Al señor colegiado no le dio la gana que se aclarase quién iba a ser el encargado de tirar los penaltis en el Barça tras el doblete de errores de Cornellà. El señor colegiado se comió patadas de todo tipo a jugadores del Barça, especialmente una coz de Víctor Rodríguez al tobillo de Pedri en las mismas narices del señor colegiado. Con Busquets, en cambio, a la primera sí vio el señor colegiado motivos para mostrar tarjeta (que los había, ojo). También pasó con Griezmann. Ni dudó el señor colegiado, también merecidamente, pero en cambio su comió una a una todas las brusquedades de los jugadores del Elche.
El sprint final
Trincao puso a prueba a Edgar Badia tras una recuperación de Mingueza y volvió a tener una ocasión cabeceando un centro de Griezmann. Badia volvió a lucirse despejando a córner. El meta fue el mejor de los locales de largo. Por fin, Riqui Puig sentenció de cabeza a centro de De Jong, en una jugada espectacular del centrocampista holandés, que condujo en vertical rompiendo líneas, centró y completó una gran actuación. Se acerca al De Jong soñado cuando se fichó ●
El dato
A por el octavo fuera Con el del Rayo del próximo miércoles, el Barça sumará ocho encuentros seguidos lejos del Camp Nou.