Un triunfo en el lugar y el momento ideal
→ Nadal abre el palmarés 2021 en su tercer torneo, en casa, tomando impulso en tierra y recuperando el nº 2
→ Con 15 años un inexperto Rafa Nadal no superó al italiano Stefano Galvani en la fase previa de 2002. Dieciocho después, camino de los 35 (el 3 de junio), levantó por duodécima vez el Trofeo Conde de Godó. No lo hacía desde 2018, pero recuperó la hegemonía en una edición especial, de recuperación tras el cierre de 2020 por la Covid.
Nadal subrayó que “es el mismo estar aquí una vez más con casi 35 años. Diez años antes esto era impensable. Este título significa muchísimo más para mí, al jugarlo con público después del año que llevamos”. En casa, en un torneo de los más tradicionales del ATP Tour y después de haber disputado Montecarlo sin público.
Sólo era su tercera competición de una temporada en la que necesitaba ya un premio a su trabajo. Comenzó en Australia con una lesión de espalda que le impidió participar en la ATP Cup por países después de la cuarentena de dos semanas junto al italiano Jannik Sinner. Llegó justo al Open y cedió ante Stefanos Tsitsipas en cuartos después de dominar por dos sets a cero. Renunció al ‘indoor’ de Rotterdam, como a Miami. Se centró en preparar la tierra batida.
Creyó haber hecho adecuadamente el trabajo en la academia, pero quedó descolocado por cómo perdió ante Andrey Rublev en cuartos de Mónaco. No le gustó su saque, su derecha, su revés. “Y después de derrotas como éstas llegan días de dudas”. Con las que lidió en Barcelona junto a su cuerpo técnico. Hasta decidió entrenar tras el partido con Cameron Norrie. Todo por mejorar y apuntalar sus opciones en el Godó.
Obtuvo la recompensa cerrando una excepcional final “con el jugaplacer dor más en forma del momento”, Stefanos Tsitsipas. Se dejó caer de espaldas sobre la arcilla de su club, como en las grandes ocasiones. Era su 87º título, el 61º en tierra, pero vive del presente y observa asimismo a medio plazo. Este éxito le da aplomo para afrontar las citas de Madrid y Roma, pero sobre todo le permite ordenar ideas y juego en el camino hacia su objetivo final, Roland Garros. En París tendrá la opción de batir el récord de títulos de Grand Slam, romper el equilibrio a 21 con Roger Federer, distanciarse de los 18 del peligroso Novak Djokovic.
Hoy recupera el nº 2 mundial en detrimento de Daniil Medvedev, por 110 puntos. Se mete en el top-10 de la Race, el ranking del año. Cumplió la tradición de lanzarse a la piscina. En solitario por la pandemia, pero con los suyos cerca. Y un talón de 178.985 euros ●
Recuperación
1 Había dudado tras la derrota en Montecarlo; retoma el rumbo con el éxito en su club y mirando a R. Garros
Dominio histórico
2 66 victorias de 70 partidos en el Godó, 452-41 en tierra