Tres toques “Sergio Busquets y 10 más” era la fórmula perfecta
Luis Enrique, en la víspera del España-Polonia, dijo que jugarían “Morata y 10 más”. Era su forma de dar confianza al delantero centro fallón. En la víspera del decisivo encuentro ante Eslovaquia, el seleccionador debió decir que jugarían “Sergio Busquets y 10 más”. La verdad es que el debut del capitán se notó y mucho. Hay un antes y un después de la Roja en la Eurocopa a partir de la entrada de Busquets. Con él al mando, el equipo cuajó una primera parte soberbia. El mediocentro más intervencionista del mundo, sin notar los diez días que el virus paseó por su cuerpo, lo bordó en el partido de ayer. Fue todo criterio y sentido común. Estuvo clarividente siempre en el pase, descongestionaba por un lado o por el otro, la pisaba cuando hacía falta, giraba sobre si mismo y recibía siempre en condiciones para empezar la transición de ataque. El de Badia dio una masterclass y se llevó el MVP. También defensivamente se le vio rápido al cruce, presionó arriba, tapó los escasos agujeros atrás e hizo la falta táctica cuando lo requería. Además, como el diablo sabe más por viejo que por diablo, en el minuto 12 fue la única persona en el césped que intuyó que no había falta de Koke sino falta sobre Koke, que se adelantó al defensa y le pegó por detrás. Las protestas de Busquets hicieron que el árbitro y el VAR revisasen una jugada que terminó en penalti ●