Joana Pastrana se despide como la reina de Europa
→ Por la puerta grande. La boxeadora Joana Pastrana (30 años) se despedía como una auténtica campeona después de retener en el Wizink Center de Madrid el cinturón de campeona de Europa del peso mínimo ante la aspirante francesa Anne Sophie Da Costa. De esta forma la púgil madrileña (17-3, 5KO) ampliaba más su historia, al convertirse en la primera mujer en sumar cuatro títulos continentales, uno más que los logrados por María Jesús Rosa, quien fuera campeona del mundo WIBF del peso minimosca y cuatro veces campeona de Europa WIBF del peso mosca. Pastrana fue muy superior a su rival, que nunca había disputado un Europeo, del primer al último asalto, reteniendo el título de campeona de Europa y sumando un nuevo éxito a una carrera en la que sobresalen sus tres títulos de campeona del mundo mundial IBF del peso mínimo.
Con el cinturón bien sujeto a la cintura, Joana tomó el micrófono y se dirigió a los aficionados que llenaban el antiguo Palacio de Deportes y que seguían la velada a través de Laligasportstv desde el centro del ring. “Sin el trabajo y sin la gente no hubiéramos llegado hasta aquí. Jamás hubiera imaginado despedirme de esta forma, ésta es una ocasión especial. Muchas gracias”, dijo en una primera instancia. Seguidamente reconocía que “me voy del boxeo con un sabor agridulce, pero no con un mal sabor de boca porque todo lo que he hecho ha sido de corazón. Lo próximo que voy a hacer –su intención es dedicarse al mundo del cine, tal como avanzó a MD– lo haré mejor que mi paso por el boxeo. No dejo nada a medias. Voy a conseguir lo que me proponga,y espero haceros partícipes a todos”. Lástima que tuviera que dejar el boxeo antes de tiempo al no poder ganarse la vida en el ring como ella esperaba. “Peleo como un hombre, pero económicamente me siento injustamente tratada”, lamentaba en su día a MD ●
LAS FRASES Joana Pastrana “Sin el trabajo y sin la gente no hubiéramos llegado hasta aquí. Jamás hubiera imaginado despedirme así”
“Me voy del boxeo con un sabor agridulce, no con un mal sabor de boca, porque todo lo he hecho de corazón”