Capitán Gonzalo
→ Hereda un brazalete que los últimos años llevaron Entrerríos, Tomàs, Nagy y Barrufet
→ “No me preguntes por qué, pero yo levanté el dedo. Tenía cinco años”, recuerda de su primer día como portero de balonmano. Rafael Sierra, su profesor de Educación Física en el colegio, preguntó quién quería ponerse en la portería y allí encontró el brazo alzado de Gonzalo Pérez de Vargas.
Aquel gesto inconsciente fue el tierno inicio de una carrera meteórica que le llevó de Toledo al Barça en 2007 y, dos años después, con 18, a debutar ya con el primer equipo, el 19 de septiembre de 2009 en el Palau contra el Toledo, un guiño a sus orígenes. David Barrufet, en su última temporada en activo, y Daniel Saric eran los porteros titulares, pero ahí empezó a foguearse la ‘joya’ de la cantera. “Gonzalo dará muchas tardes de gloria al Barça”, decía ya entonces Barrufet.
El toledano se curtió antes dos temporadas en el BM Granollers y una en el Toulouse, de 2011 a 2014.
Cumpliendo a rajatabla con aquellas expectativas, en plena madurez deportiva a sus 30 años, no sólo es el digno heredero de la portería del Barça sino que también recoge el brazalete que llevó en su día ‘Barru’. Laszlo Nagy, Víctor Tomàs y Raúl Entrerríos han sido los últimos eslabones de una portentosa cadena de capitanes a la que ahora se añade Gonzalo.
“Deportivamente he dado un paso adelante y ahora tengo que asumir también un papel importante como capitán. Llevo muchos años en el club y, con el paso de los años, he ido aprendiendo de los mejores”, dice un D’artagnan que tendrá como mosqueteros en la capitanía a Ludovic Fàbregas, Dika Mem y Aitor Ariño.
Gonzalo ha empezado un nuevo curso con Antonio Carlos Ortega sin apenas vacaciones por su participación en los Juegos de Tokio, donde cerró con el bronce olímpico una temporada de ensueño con pleno de títulos (6) y victorias (61) con el Barça. El colofón llegó con su tercera Champions (2011, 2015, 2021) y el MVP de la Final Four después de hacer 14 paradas (37%) y marcar tres goles en la final contra el Aalborg (36-23).
De otro mundo
El canterano también fue el jugador más destacado en las semifinales contra el HBC Nantes (31-26) porque sus 16 paradas (39%) desactivaron otra magnífica actuación del guardameta rival, Emil Nielsen (14 y 32%), que llegará al Barça en 2022 para formar pareja con él. “Ganar la Champions como lo hicimos, ganando los 20 partidos, es algo sin precedentes, asombroso, te hace sentir de otro mundo. Además, ya puedo decir que soy olímpico y en mis primeros Juegos conseguir una medalla es algo que ya es para siempre”, exclama Gonzalo después de la apoteosis de los últimos meses.
“La posición de portero tiene mucha visibilidad para lo bueno, pero también sobre todo para lo malo. Si la defensa funciona, el trabajo del portero es mucho más fácil. Yo seguiré hasta que mi cuerpo me diga que pare. Los porteros suelen jugar hasta bien entrados los 40, pero vamos a ver dónde me lleva mi camino, ya que el éxito puede ir y venir y yo soy un tipo con los pies en el suelo”, reflexiona el nuevo capitán del Barça ●
Es el digno sucesor del mítico ‘Barru' tanto en la portería del Barça como de la selección