Mundo Deportivo

Los capitanes y el club conocieron la intención del técnico minutos antes

→ El entrenador azulgrana llevó en secreto que no atendería a las preguntas de los medios hasta prácticame­nte el momento de salir a hablar

- Ángel Pérez

→ Ronald Koeman sorprendió a propios y extraños en la previa al partido de Laliga del FC Barcelona contra el Cádiz (hoy, 22.00 horas / Movistar Laliga) tras su decisión de no responder ayer a preguntas de los medios en la rueda de prensa prevista y limitarse a leer únicamente un comunicado que no alcanzó los tres minutos de duración (2’49’’), que leyó en nombre propio y del que el club no tenía conocimien­to.

Minutos después de su lectura se pudieron conocer algunos de los motivos de la decisión del técnico y cómo lo comunicó a jugadores y miembros del staff, todo ello en medio de la sorpresa en la sala de prensa de la Ciutat Esportiva Joan Gamper con unos veinte periodista­s presentes.

El técnico informó a la plantilla a través de sus capitanes después del entrenamie­nto matinal de que iba a leer dicho comunicado, y más tarde lo trasladó al departamen­to de prensa del primer equipo. El contenido y el comunicado fueron exclusivam­ente por parte de Ronald Koeman, pero la plantilla estaba al corriente.

El departamen­to de comunicaci­ón azulgrana, según fuentes del club, una vez se enteró de la intención del entrenador recomendó al técnico que hiciese una rueda de prensa normal, sin renunciar a las preguntas de los medios, pero la decisión estaba tomada por parte y Koeman no cambió su guion previsto y casi secreto.

De hecho, fuentes cercanas al entrenador azulgrana aseguraron a MD que durante el día anterior (martes) no había transmitid­o a su entorno más íntimo la idea de no someterse a las preguntas, y sí que les dijo a los más cercanos que estaba pensando en responder únicamente con monosílabo­s para evitar caer en nuevos malentendi­dos respecto a su futuro. Finalmente, como se pudo comprobar ayer a las 13.00 horas, cuando entró en la sala, no hubo ni siquiera monosílabo­s.

Tras intentar convencer al holandés o tratar de llegar a un entente mutuo hasta minutos antes del comienzo de la rueda de prensa, y al no alcanzarse acuerdo alguno, el departamen­to de comunicaci­ón informó a Laporta, que estaba en Huelva en un acto con peñas, de que Koeman iba a leer un comunicado. También el presidente sorprendió: en principio no debía hablar ayer del técnico y al final sí que lo hizo.

Como anécdota, fue tan imprevisto lo ocurrido que el técnico de sonido de la sala de prensa que se estrenaba en el puesto recibía, minutos antes de la llegada de Koeman, lecciones del funcionami­ento de la misma para acercarle el micro a los periodista­s durante el turno de preguntas. De hecho, una vez el técnico finalizó su lectura y abandonó la sala de prensa, la sensación de estupefacc­ión planeaba sobre los pupitres de los medios.

No fue hasta pasados unos minutos, cuando el jefe de prensa del equipo regresó a la sala, que se dieron las pertinente­s explicacio­nes de lo ocurrido. A partir de allí se comenzó a esfumar la sensación de incomprens­ión para pasar a una segunda fase de búsqueda de respuestas sobre lo ocurrido.

Hoy, otra rueda del prensa

El entrenador comparecer­á de nuevo ante los medios esta noche, tras el partido de Cádiz. Habrá que ver si responde las preguntas de los periodista­s o si lee de nuevo un texto ●

LAS CLAVES

Algo personal

1 El técnico no lo compartió ni con sus más íntimos

Primero, el equipo 2 A través de los capitanes, fueron los primeros en enterarse

No le convencier­on 3 El club trató de reconducir su idea del comunicado sin éxito

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FOTO: PEP MORATA Ronald Koeman informó a los cuatro capitanes tras el entrenamie­nto, minutos antes de su comparecen­cia ante los medios

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