Hoy a Fali ya no le temblarán las piernas
El Barça catapultó la carrera del mediocentro, ahora en el Cádiz
→ Rafael Giménez Jarque, más conocido como Fali, se enfrentará esta noche al Barça, un club que lo catapultó al fútbol profesional. Ahora es una pieza clave en el Cádiz, club con el que llegó a Primera División.
Fali firmó por el Barça B en enero de 2016, cuando tenía 23 años (ahora tiene 28). Entró en el vestuario para ser el veterano y marcando territorio. Apretaba a sus compañeros durante los entrenamientos y odiaba perder. Con el pan de sus hijos, ya tenía dos, no se jugaba, les decía. Incluso corrió la frase de presentación aquella de “al que no corra, lo rajo”, algo que posteriormente el propio centrocampista valenciano desmintió entre risas.
Era el brazo ejecutor de Gerard López en el campo. El mandaba sobre el terreno de juego y defendía a sus jugadores. A más de uno le hizo tocar de pies al suelo. Como el día que entró en el vestuario después de una derrota y se encontró a los chavales con la música a todo trapo. Agarró el altavoz y lo tiró a freír espárragos. La reacción de Fali fue arrancarlo del enchufe y estamparlo contra una pared. “A tomar por c... lo mandé”, recordó Fali entre risas en una reciente entrevista a Onda Cero. “Los nenes están en una burbuja y piensan que fuera de ahí es igual. Y no lo es. No es lo mismo jugar en el Barça, en el Madrid, que en otros equipos, es una burbuja y no es la realidad. Víctor Chust ha salido del Madrid y me dice: “joder, esto no tiene nada que ver”. Pero es un gran chaval y yo le estoy ayudando mucho”, explicó en la citada entrevista.
De su etapa en el Barça, Fali, que estrenará su Informe+ en Movistar la próxima semana, recuerda con especial emoción el ascenso logrado a Segunda A la temporada 201617 y cuando subió por primera vez a entrenar con el primer equipo. La primera vez le pidió a Carlos Busquets que le presentara a su hijo, un referente para él y a quien considera el mejor del mundo. Y Sergio le preguntó si quería conocer a Leo. Le temblaban las piernas de lo nervioso que estaba y acabó haciéndose una foto con Leo que tiene enmarcada en su casa y en su bar.
Esta vez ya no estará Messi, a quien se enfrentó el curso pasado. En esta ocasión, a Fali ya no le temblarán las piernas. Está agradecido al Barça de por vida, pero en el campo no hay amigos ●
El valenciano, genio y figura, guarda un sinfín de anécdotas de su etapa como culé