3. Los cambios ayudaron a ratificar el despegue azulgrana
El equipo ‘ che’ volvió a ser aspirante a empatar/ganar cuando Carlos Soler entró en funcionamiento. Eso fue a partir del 60’, antes, Guedes la tuvo con un derechazo brutal pero el brazo de Ter Stegen se convirtió en bloque de acero para evitar otro mal inicio azulgrana.
El Barça estaba enganchado a Ansu Fati que, otra vez, casi amarga a Cillessen cuando el Valencia logró meter el partido en campo local y sumar más fútbol que en el primer acto. Le faltó lo más importante: la precisión tanto en el remate como en el último pase pese a la voluntad pegajosa de Maxi Gómez contra Piqué y Eric García. Una falta ejecutada por el goleador visitante puso al Camp Nou con el miedo en el cuerpo. Al final, Coutinho metió el 3-1 y disipó el angustioso final.
Pero ayer hubo dos diferencias determinantes entre el Barça y el Valencia: la calidad de Fati y los cambios. Muy bien Nico, de gran ayuda para Busquets, y Mingueza queriendo atacar más que defender. Interpretar y tomar decisiones. Bravo.
Koeman ha recuperado a jugadores lesionados -el Kun también participóy ha cambiado de discurso. En la semana decisiva, ganar era vital. Ahora hay que mantener el vuelo ●