Una maleta, un poeta y un sindicalista
AXavi le pasó lo que a Koeman .El holandés iba para arriba, perdió contra el Granada y se le esfumó la Liga. No se ha explicado suficiente que antes de caer ante los nazaríes la dinámica del Barça había entrado ya en barrena. Xavi, por su parte, parece que haya vuelto a la casilla de salida cuando Dimata y De Tomás perdonaron la derrota culé. No se ganó al Benfica y desde entonces se han ido descontando títulos porque las expectativas fueron excesivas. Elche, Mallorca y Granada fueron serios avisos, se forzó la prórroga contra un Real Madrid ahorrativo y las campanas repicaron a fiesta mayor. Una semana después el equipo que lidera Muniain y la fogosidad de la Catedral han dejado al Barça desnudo como nunca.
Siendo dos técnicos distintos, las evasivas de Koeman son las mismas que las de Hernández. Ambos entraron respectivamente en bucles recursivos y se defienden lamentando que no se ejecuta en el campo lo que se ensaya en los entrenamientos. No hay lugar para la euforia, ni tampoco para caer en el desánimo. Cuesta mantener tanto a calma como la lámpara encendida y mucho más si se coge al vuelo el relato paternalista que sale de la directiva.
El jueves lució el sol y acabó en depresión. A Dembélé le vaciaron la taquilla y le pusieron la maleta en la puerta. Fue castigado y el francés se rebeló reivindicándose con una carta surrealista que denunciaba ser objeto de chantaje, no sin ahorrarnos el obsequio de su lado más poético con una nota misteriosa: ‘seguramente el amor forma parte del chantaje’.
La lógica dice que Ousmane debió estar en Bilbao. Su ausencia redujo las opciones del equipo porque es el delantero con más talento y cobra por ello. Los blaugrana remataron tres veces por 15 los leones. La delantera que sacó Xavi en San Mamés estuvo compuesta por dos noveles aún impresionables, Jutglà y Abde, acompañando a Ferran ;la prórroga acabó con el valenciano, Braithwaite y Dest, un desatino. El danés apareció con más pelo y el neerlandés fue rescatado por Hernández de la peana de los traspasos tras semanas desaparecido. Mañana, ante el Alavés, sin Ansu lesionado para dos meses, la peor de las noticias, Dembélé seguirá sin ser utilizado. Antes, Laliga anunció que se habían materializado 400 millones avanzados del fondo CVC repartidos entre los 37 clubs, a la espera de recibir otros
300 a finales de mes. El 15% está destinado a fichajes, pero Barça, Real Madrid y Athletic rechazaron este maná. Laporta ha optado por el dinero virtual de la no menos supuesta
Superliga que lidera Florentino, al que, por cierto no le va mal con esta alianza: nuevo estadio cuatro años antes que el Barça, Messi y Griezmann alejados del Camp Nou, fichaje de Mbappé ,líderenlaligay vivo en Champions y la Copa.
No parece un buen negocio pujar jugando a las cartas sin una buena mano. Y menos si enfrente está sentado Moussa Sissoko, un agente controvertido con una ascendencia absoluta sobre Ousmane que mantiene al club en jaque. El mismo que permitió que su protegido malviviera en su casa de Barcelona como hizo en Dortmund y ahora está exigiendo una renovación de crack que no merece. El Barça no calculó bien al señalarle el camino de salida bajo la amenaza del ‘usted tiene que salir inmediatamente’. Si la estrategia pasaba por forzar su salida o en provocar un cisma con su agente, no ha colado. Con ello el Barça ha perdido el control del relato y ahora el jugador ha pasado a interpretar el papel de ofendido. De otro lado, juzgar el grado de compromiso de un futbolista siempre resulta complejo. El clan tiene, asimismo, cogido al Barça por la vía legal.
El escenario cambió cuando Xavi mudó su posición favorable al jugador. De empujar infructuosamente por su renovación, pasó a asumir que lo más inteligente era utilizarle hasta que expirara su contrato el 30 de junio. No hubo acuerdo y el entrenador asumió las posiciones drásticas del club probablemente muy a su pesar.
Regalarle los oídos a Ousmane fue una estrategia pueril que no llevó a nada. Su comparación con Mbappé no tuvo menos afortunada.
Sería interesante saber lo que opina Jordi Alba sobre cómo ha llevado el Barça el asunto con su compañero de vestuario.
El lateral es vicepresidente de la AFE, lo que no era conocido por muchos. A Alba le honra su sentido de la igualdad y la justicia al seguir, de alguna forma, la herencia del fuerte sindicalismo de L’hospitalet y el Baix Llobregat de los años 70