Una Juventus sin deseo suma otro despropósito
italia → Allegri se acerca al cese tras perder en Monza
→ Lejos de transmitir algo, la Juventus es caos, desidia, anarquía. Y añadió otro despropósito en la nueva casa de Silvio Berlusconi, el recién ascendido Monza, de fiesta tras lograr la primera victoria de su historia en la Serie A con el gol de Gytkjaer en el minuto 74 en el estreno como nuevo técnico del ex juventino Raffaele Palladino.
Se reía en la previa Massimiliano Allegri –sancionado en la grada– de su posible destitución mientras su equipo anda mustio, pasivo. Depresión de los jugadores o a saber si silenciosa rebelión para mandar a la guillotina al técnico italiano, que presenta unos números alarmantes: sólo 2 victorias y 4 empates más esta derrota en la Serie A para continuar una jornada más fuera de los puestos europeos. 0 de 6 en Champions. Y ningún triunfo en septiembre.
El juego de la Juventus es inconexo, no combina con fluidez y le pide en el peor momento a Vlahovic que se busque la vida. La involución del serbio va en la línea de lo que le está pasando al equipo, ya que no ha marcado este mes. El bagaje de la ‘Vecchia Signora’, sin ambición también en la presión, se resumió a casi una ocasión clara en todo el partido, un cabezazo de Kean blocado por Di Gregorio.
El único arrebato de rabia fue el de Di María y en vano, pues fue expulsado antes del descanso por un codazo a Izzo, acción por la que luego se disculpó en las redes. Tras la pausa, Gytkjaer le ganó la espalda a Gatti y remató un centro de Ciurra que no encontró oposición ante la llamativa indiferencia ‘bianconera’ ●