Pilotar sin dolor, el gran éxito de Márquez en Japón
→ Lo mejor no fue la primera pole en tres años, fue la mejoría del brazo
→ El fin de semana del Gran Premio de Japón fue una sucesión de pequeñas victorias en el lado izquierdo del box Repsol Honda y no siempre relacionadas con el resultado, que fue bueno, con esa primera pole en tres años para Marc Márquez el sábado y el cuarto puesto en la carrera del domingo. La gran victoria de Marc fue poder concluir una carrera sin dolor y en condiciones hasta de atacar. Y eso que en su regreso a la competición en Aragón una semana antes tenía sus dudas de si podría completar el GP japonés por la radicalidad de su trazado.
“En Aragón sí que esperaba terminar bien, pero aquí no esperaba terminar tan bien y poder atacar en las últimas vueltas. Hay síntomas, porque el brazo izquierdo se me ha puesto como una piedra porque seguramente he ido compensado con él, pero el brazo derecho ha acabado bien y, sobre todo, no he sentido el dolor ese que te llega a la cabeza, que ni la adrenalina lo suple. He sentido como cuando vas en bici y en las últimas vueltas ya no puedes, un brazo lento pero que sabía lo que hacía”, desveló Marc Márquez.
Si hay una pregunta que le revienta es la que tiene que ver con su brazo. En cada reaparición pública desde el maldito julio de 2020 jerezano ha sido la pregunta recurrente y no hacía más que acrecentar la ansiedad en su vía crucis de puertas adentro. Prohibió a los suyos que se refirieran a ello, quiere una vuelta a la normalidad en toda regla en esta cuarta recuperación en la que todo va viento en popa.
“Del brazo se habla muy poco, casi con el único que hablo del brazo es con Alberto (Puig, team mánager Repsol Honda), porque él es el que más ha estado en el día a día, previo a la operación y después de la operación, y es el que ahora también está muy encima para ver la evolución y para tenerme controlado. Alberto en eso sabe un rato y le estoy muy agradecido por ello”, dijo Márquez.
La gestión del esfuerzo del fin de semana la decide él. “No se habla del brazo dentro del box, pero no se habla si no les digo yo que ‘esta curva y esta no las comparéis, porque no serán iguales, porque tengo limitación’. Aquí en la entrada a meta decía que no me pidieran nada porque la hacía como podía. En las otras curvas lo podía hacer y sabía las dos o tres en las que iba más justo”.
“También se lo dije después del FP1 y cuando planeas decido yo. El warm up no se hace entero, se hace una parada en medio para irme guiando un poco. No empiezo los fines de semana gestionando, sino que los empiezo y voy donde llegue”, desveló Marc.
Un ejemplo de que el brazo ya no es un tema al que recurrir lo explicaba Marc ante los medios: “Ahora mismo estoy aquí hablando y no me toco el brazo. Si duele algo inconscientemente te lo vas tocando. En la rueda de prensa de ayer me lo iba tocando un poco, estirando. Pero el brazo ha estado rotado y ya no es sólo los músculos, es que hay nervios dentro que se van estirando y cuando el músculo se corrige se vuelven a contraer”, contó ●
“El brazo derecho ha acabado bien y no he sentido ese dolor que te llega a la cabeza”