La Nations League ,unbuen invento que llegó para quedarse
¿Vieron cómo celebraba la expedición italiana su clasificación para la Final Four de la Nations League? ¿Se dieron cuenta de como de destrozados quedaban los jugadores húngaros cuando creían que serían primeros de un grupo con Italia, Alemania e Inglaterra? También España celebró el gol de Morata en Braga, en el minuto 88, como si de la final de una Eurocopa se tratara. Luis Enrique se volvió loco. Cristiano se fue refunfuñando del campo, indignado, sin disimular ni un ápice su decepción. Todas las selecciones, todos los jugadores y las aficiones sin distingo, soñaban con jugar, dentro de un año, las semifinales de la Nations League. Al final, sólo España, Italia, Países Bajos y Croacia disputarán la última fase de un torneo que está creciendo año a año. Nadie -ni tampoco la prensa, ni los patrocinadores y anunciantes- se toma ya estos partidos de selecciones como unos encuentros amistosos. La Nations League ya no es una competición que sirve para que los países hagan el rodaje para disputar un Mundial. La Nations League ha pasado a ser una nueva competición continental, con su interés, su palmarés y su vida propia. Porque a diferencia del Mundial o la Eurocopa, la UEFA ha ideado que aquí haya descensos y ascensos. Por ejemplo, tiene su enjundia que Inglaterra haya descendido a la Liga B mientras que Escocia ha subido al nivel de las 12 mejores selecciones. Para el espectador, siempre es mejor ver partidos donde hay cosas en juego que no pachangas. Y especialmente, que un verano haya Mundial, otro Nations League, otro Eurocopa y otra Nations League… Es una gozada ●