Golpe al sevilla
→ la victoria del Atlético se cimentó en las bases del Cholismo: presión y seguridad atrás
→ El Atlético de Madrid se marchó de Sevilla con una gran victoria cimentada en las bases del Cholismo. La seguridad atrás y la presión fueron claves para sacar los tres puntos. En un partido especial para Koke, que se convirtió en el jugador con más partidos en la historia del club, 554, también supuso un respiro para Marcos Llorente que volvió a marcar año y medio después. Sin olvidar el gran partido de Saúl, que dejó algún slalom que recordó a aquel gol contra el Bayern de Múnich; el gran nivel de Savic y Giménez, Cunha que volvió a demostrar que está para todo, Nahuel Molina hizo su mejor encuentro aunque acabó lesionado y Morata que volvió a ser letal en el uno contra uno. Enfrente, un conjunto hispalense en el que Julen Lopetegui podría haber dirigido uno de sus últimos partidos. Tiene mala pinta su equipo.
El encuentro comenzó con dos zonas de batalla. La primera era la zona de salida de balón del Sevilla, Simeone sabía que si presionaba a una zaga tan joven podían llegar errores y por eso colocó arriba cinco auténticos perros de presa como son Llorente, Koke, Saúl, Cunha y Morata. Hasta Bono pasó apuros para tratar de lanzar al Sevilla desde abajo.
La segunda zona de batalla estuvo en la banda izquierda del Atlético de Madrid. Las asociaciones de Isco y Óliver Torres provocaron que casi todo el peligro hispalense llegase por esa zona. La diferencia es que el Cholo reaccionó retrasando a Cunha para que les ayudase y poco a poco el Atlético comenzó a tapar ese agujero.
La presión adelantada colchonera provocó las mejores ocasiones del Atlético con dos disparos de Morata que se marcharon alto, otro de Saúl que detuvo Bono sin muchos problemas y llegó el 0-1.
Saque de banda del Sevilla. Cunha que robó el balón, se lo entregó a Koke, el capitán que ve en mejor posición a Llorente, quien tras driblar a Telles marcó con la pierna derecha. Era el primero que hacía desde mayo de 2021.
Los últimos 15 minutos, el Sevilla llevó el dominio ante un Atlético casi impenetrable. Así se llegó al descanso.
El segundo acto empezó con la misma tónica. El Sevilla dominando y el Atlético bien puesto atrás. Aunque la entrada de Rakitic y Jesús Navas agitó el partido. Pudieron marcar con un cabezazo de Isco y un disparo lejano de Gudelj.
Pero ahí acabó la reacción hispalense. Llegó el 0-2. Saque de puerta de Oblak, Morata peinó la pelota, Cunha a trancas y barrancas logró hacerle la pared y el madrileño en el mano a mano que hizo el segundo tanto con una bonita vaselina. Mazazo para el Sevilla.
A partir de ahí, el cuadro andaluz siguió tratando de encontrar rendijas en el entramado defensivo colchonero. Mientras que el Atlético coleccionaba ocasiones a la contra. Cunha, Griezmann o incluso Correa en varias ocasiones pudieron hacer el tercero. Pero finalmente el partido acabó con el 0-2 y con la mala noticia de Nahuel Molina, que en su mejor partido se marchó lesionado ●