Argentina y Messi golean y se divierten en Abu Dhabi
→ Doblete de Di María y el cuarto gol fue una delicia de Leo en la antesala del Mundial
→ Sonríe. Gana. Golea. Se divierte. Sueña. Es Argentina. Es la selección de Lionel Messi que hace lo que corresponde con Emiratos Árabes Unidos: sin demasiado esfuerzo, tritura a un rival ultra modesto (5-0). Pasa en la última función antes del Mundial. Sucede en Abu Dhabi. Con un doblete de Di María y sendos goles de Messi, Julián Álvarez y Joaquín Correa. Se trata de un equipo afianzado, convencido, feliz, ganador, ahora invicto en 36 partidos, súper candidato... No hay mejor modo de desembarcar en Qatar.
Algunas pruebas realizó ayer Lionel Scaloni en puestos donde tiene dudas y en otros donde los titulares no se hallan en plenitud física. Jugaron de inicio Juan Foyth como lateral derecho, Lisandro Martínez como segundo central, Alexis Mac Allister en el rol de Giovani Lo Celso y Julián Álvarez como centrodelantero. Aprobaron con comodidad.
Resultó ínfima la oposición de Emiratos Árabes Unidos, diseñada con un 4-5-1 por el entrenador argentino Rodolfo Arruabarrena, el ex Villarreal que había contado en la previa que sus hijos le pedían que sus jugadores no tocaran a Messi justo a días del debut mundialista.
Argentina no había logrado precisión ni profundidad en la búsqueda, pero en la primera conexión exacta pegó el primer grito. Cortó Nicolás Otamendi y nació un veloz contraataque . Angel Di María habilitó a Messi, el 10 asistió a Julián Álvarez y el 9 la empujó. Al ratito, Fideo inventó una volea de zurda perfecta, a centro de Marcos Acuña, y la albiceleste celebró el segundo.
Fue un paseo de Argentina, con más goles bonitos. En el tercero, Angelito gambeteó a un par de defensas, al arquero y la empujó. El cuarto, una delicia de Leo: resolución de derecha a un ángulo, tras una colección de pases internos.
Ensayó una movida táctica Scaloni desde el inicio de la segunda etapa, con una línea de 5 defensas, que construyó con los ingresos de Gonzalo Montiel (lateral derecho), Germán Pezzella (central libre) y Nahuel Molina (lateral) izquierdo. También entró Joaquín Correa. Hubo minutos para Enzo Fernández.
En ese nuevo contexto, Rodrigo De Paul regaló una dulce asistencia y Joaquín Correa celebró el quinto. Y Guido Rodríguez reemplazó a Leandro Paredes. El que no salió fue Messi. Los 90 minutos jugó Leo. No quiere perderse ningún momento celeste y blanco el 10. Y es lógico: Argentina es una máquina que funciona a la perfección. Por eso a la Selección y a su capitán les sobran razones para soñar ●