TRIUNFO CON SUSPENSE
→ Un gol de morata en el descuento y tras revisión del var da la primera victoria en girona al atlético de madrid
→ El Atlético de Madrid ganó por primera vez en Girona. A la cuarta fue la vencida. Y no podía ser de otra forma. Con suspense, con agonía, en un partido que resolvió Morata con un gol en el descuento tras revisión del VAR. Tres puntos de oro. Y otro territorio conquistado por el Cholo.
Salió mandón el conjunto rojiblanco, con pelota y sin ella, presionando arriba, pero tras cinco minutos de dominio, el equipo comenzó a perder balones incomprensibles en la salida. Koke, Lemar, Memphis... Eso dio aire al Girona, que con dos robos y sus posteriores contras, se hizo con el control del juego. Así llegó su primer disparo a puerta, de Borja García, y una mano de Savic en el área que no acabó en penalti porque Castellanos estaba en fuera de juego.
No fue hasta el minuto 20 cuando el Atlético se asentó. Empezó a combinar mejor, con Carrasco y Lemar por la izquierda y Llorente y Griezmann por la derecha. Y empezaron a llegar las ocasiones. Primero una de Griezmann y después una de Memphis, clarísima, tras pase genial de Llorente al hueco y regalo de Griezmann. El neerlandés, que hizo un buen movimiento, mandó la volea arriba. Midió mal para golpear.
Carrasco fue el siguiente que lo intentó, con un disparo desde fuera del área que detuvo Gazzaniga y luego, de nuevo Memphis. Otra clara, esta tras revolverse en el área. La pegó con violencia a cinco metros del arco y se fue por encima del larguero. El Girona no daba señales de vida en ataque, con Riquelme yendo de más a menos, Aleix con poca incidencia en el juego y con Arnau metiéndose de mediocentro en ataque y sufriendo algo en defensa. ¿Por qué se habla de estos tres jugadores? El primero es propiedad del Atlético y a los otros dos, los pretenden en el Metropolitano. 0-0 al descanso.
Salieron intensos los rojiblancos (negros) del vestuario, con Llorente probando una volea tras otro pase de Griezmann al segundo palo. Respondió Tsygankov cuando una gran jugada individual y lanzamiento al que respondió Oblak. Pero antes hubo polémica. Porque en un córner, un cabezazo de Hermoso acabó impactando en el brazo de Oriol Romeu. Avisaron desde el VAR a Melero López. Vio la jugada en el monitor y señaló falta por un empujón del central. Acción controvertida, llaman al árbitro y decide (bien en este caso). No debería ser tan difícil.
Llegó la hora de juego. O lo que es lo mismo, el primer cambio del Atlético. En este caso, tres de golpe. Simeone metió a Morata, Correa y De Paul por Memphis, Llorente y Lemar. Enfado de lo dos primeros, quién sabe si consigo mismo o con el entrenador. Llorente no estaba mal, cierto es, pero tenía tarjeta. Michel metió a Valery por Borja García.
Y estas variaciones le sentaron mejor al Girona. O peor al Atlético. Fue entonces cuando apareció Oblak para abortar el que hubiese sido uno de los goles de Laliga. David López vio al esloveno adelantado y la pegó desde el centro del campo. El balón iba dentro, pero el portero reaccionó tiempo mandándola a córner. Paradón.
Entró Stuani, en su partido 200 con el Girona. Y Saúl por Carrasco, Kondogbia se ha convertido en invisible para el Cholo, aunque este partido pidiese un hombre de sus características. Había reaccionado el Atleti, con disparos de Griezmann y De Paul. Pero el Girona insistía, de nuevo con Riquelme. Estaba Oblak, otra vez providencial.
Ocho minutos de descuento. En el primero Arnau evitó el gol de Correa a bocajarro. Y en el segundo, llegó el 0-1. Con mucho suspense. Porque Correa prolongó un córner y remachó Morata en el segundo palo. Levantó la bandera el asistente pero tras una eterna revisión, se dio validez al tanto. Ganó de forma agónica el Atlético, que le saca seis puntos al quinto y al que le ha cambiado hasta la fortuna tras el Mundial ●