Los 16 años que le quedan al Cholo en el Atleti
Has oído alguna vez aquello de que no se puede vivir sin amor? Pues el oxígeno es más importante”. Esta frase es de una famosa serie de televisión que muchos lectores reconocerán. Si me permiten la broma… ¡diría que las victorias importan todavía más que respirar! En lo que llevamos de 2023, si no me fallan las cuentas, el Atlético de Madrid ha sumado 21 de 30 puntos en La Liga. Un balance muy positivo que está afianzando al equipo en puestos que dan acceso directo Champions League.
El lunes viajábamos a Girona con la presión añadida de aumentar distancias tras los empates de Real Sociedad y Betis. Con mucha emoción final marca de la casa colchonera, logramos la victoria con un tanto in extremis de Álvaro Morata .El madrileño está teniendo menos minutos de los acostumbrados, pero aprovechándolos al máximo. Además fue una victoria con un simbolismo especial, los primeros tres puntos que sumamos en Montilivi. Lo más importante: la jornada terminó con el conjunto indio a seis puntos del quinto clasificado y tres del cuarto.
Koke llegó a plantear en una entrevista reciente a Mundo Deportivo que “¿y por qué no intentar quedar segundos?”. Me encanta la actitud de nuestro gran capitán y estoy totalmente de acuerdo con él. Es maravilloso ese momento en el que dejamos de preocuparnos por debajo (siempre con cautela, obvio) y empezamos a soñar por arriba. Lo suelo sentir en mis redes sociales. En cuestión de pocas semanas he pasado de recibir mensajes catastrofistas a diario, algunos llegando a insultarme personalmente, al optimismo actual.
Desde luego las victorias son el oxígeno del fútbol.
Con 21 de 30 puntos en 2023, estoy seguro que muchos habrán pensado “de haber sido así desde el inicio de temporada estaríamos aspirando al título”. Razón no les falta. Pero el fútbol, al igual que la vida, son estados de ánimo. No han cambiado mucho las cosas, más allá de que la pelota ahora le ha dado por entrar cuando tiene que entrar. Aprovecho para mandar un abrazo muy fuerte a toda la plantilla, el cuerpo técnico y por supuesto a la afición, que se escuchó más que la grada local en Girona. También para nuestra leyenda Juanfran, a quien doy la enhorabuena por su nueva faceta como comentarista.
Para terminar, me gusta recordar que desde que llegué a España en 1987, solo he visto al Atleti ganar tres campeonatos. En los tres estaba Diego Pablo Simeone. No tengo la menor duda de que el cuarto y el quinto que algún día celebraremos, también serán dirigidos por el técnico con más partidos de la historia rojiblanca. Se lo dije en el mensaje de felicitación por su reciente récord y vuelvo a comentarlo en estas líneas: en 2012 pronuncié públicamente mis deseos de él se convirtiese en nuestro Alex Ferguson. Querido Cholo, ¡cuento contigo otros 16 años (por lo menos) para igualarle! ●