Alerta por los casos ‘Alhama’ y ‘Santiso’
→ La Liga de fútbol femenino se ha puesto en alerta a raíz de las dos últimas polémicas de supuesto maltrato psicológico y acoso vividas en el Alhama de Murcia y en el Rayo Vallecano. Los conocidos casos ‘Alhama’ y ‘Santiso’, que cuestionan los métodos de trabajo y la conducta inapropiada de los entrenadores Randri García y Carlos Santiso hacia sus jugadoras, han encendido las alarmas y han indignado a los seguidores de ambos equipos, que no entienden cómo es posible que los clubs no tomen cartas en el asunto y que los técnicos se mantengan impunes en sus cargos.
Si bien los sindicatos sí se han puesto manos a la obra a través de una serie de denuncias, lo cierto es que el Convenio Colectivo se ha situado bajo el foco y la pregunta está en el aire. ¿Cómo están de protegidas las futbolistas de la Liga F, la primera liga profesional de un deporte femenino en España?
Descalificaciones como “gorda”, “lesbiana” o “no sirves para estar en Primera” se le atribuyen a Randri García, entrenador del Alhama, además de una supuesta fotografía suya junto al cuerpo técnico de contenido sexual enviada a toda la plantilla –entre ellas, una menor de edad– tomada presuntamente tras la victoria del equipo ante el Valencia en la jornada 23 de la Liga F. También se dirigiría con malas formas e insultos a ciertas jugadoras, unas conductas reiteradas y abusivas que habrían llevado a alguna futbolista a pedir la baja laboral.
Tras salir a la luz estos episodios, la ex jugadora del Alhama Nazaret Segura explicaba en los micrófonos de ‘Radioestadio Noche’ que “solo pude estar seis meses en el club, no lo aguanté más. El entrenador te infravalora tanto que sientes que no sirves para nada. Desde entonces no he podido pisar un campo de fútbol, me echo a llorar”.
Pese a que 15 jugadoras de las 24 que conforman la plantilla han asegurado esta semana a través de un comunicado conjunto que “no hemos sido acosadas sexualmente por nuestro entrenador ni hemos sufrido comportamiento de esa índole por parte de alguna manera”, lo cierto es que el sindicato FUTPRO ha denunciado los hechos a Inspección de Trabajo, CSD y RFEF y lo puso en conocimiento del club a través de un burofax hace una semana. El propio club aseguró que se llegó a activar el protocolo de actuación recogido en el convenio colectivo de la Liga.
La polémica destapada recuerda en gran medida al ‘caso Santiso’, el pasado año, en que el entrenador del Rayo envió a su cuerpo técnico un audio por Whatsapp en que instaba a “hacer una como los de la Arandina” –en alusión a la violación en grupo de tres jugadores a a una joven de 16 años– a fin de alentar a sus ayudantes. Pese al rechazo unánime, el técnico sigue en el cargo ●
Ambas polémicas ponen de relieve que las jugadoras podrían estar desprotegidas
Los sindicatos presentan denuncias pero los técnicos siguen en sus cargos