Frenkie y el Barça
Tener a Frenkie en el terreno de juego es una garantía espectacular. Y su peso como futbolista se nota cuando está y también cuando no está. El Barça, queramos admitirlo o no, echa muchísimo de menos al centrocampista neerlandés en sus partidos, sobre todo en estas últimas semanas en las que andábamos vigilando cada sesión de entrenamiento para ver si saltaba al campo o no. Lo intentó en aquella famosa previa del clásico, pero desde entonces surgió la obligación de ir con mucho cuidado con el jugador al persistir las molestias. Por fin se acerca su ansiada reaparición y todo parece indicar que volveremos a disfrutarle ante el Rayo Vallecano, tal y como confirmó Xavi Hernández hace pocos días en rueda de prensa.
Pero hablar de Frenkie también es hablar constantemente de su futuro. Es una página segura en cada mercado de fichajes, por no decir un cromo fantástico en tiempos de crisis económica, como se vio claramente en el verano del 2022. El tema próximo irá para largo y no será sencillo, imaginando el posible proceso de renovación de contrato que expira en junio de 2026. Entre el “queremos que se quede” de la directiva y “el estoy feliz en Barcelona” de Frenkie, habrá seguramente capítulos para hacer un tercer documental. Ojalá me equivoque.
Eso sí, De Jong tiene la capacidad absoluta de mantenerse al margen y llevarlo todo en silencio. Tanto su enfado como su alegría. Sus declaraciones son fijas en el tema del futuro y marcan el camino de una manera muy clara. El periodista puede insistir perfectamente en sus preguntas, pero la respuesta difícilmente se moverá del “estoy feliz en Barcelona” ●