¿Con Rafa Márquez se solucionarían los problemas?
El Barça venía derrapando a pesar de cuatro victorias consecutivas. Que el Almería y el Barbastro le marcasen dos goles a Iñaki Peña ya hacía presagiar un revolcón ante el Madrid, el equipo más en forma de Europa. Así fue. Y Xavi, que ya andaba tocado porque el equipo, desde que ganó la Liga en mayo, ha bajado su nivel de juego y de activación, está en entredicho. El plan B, desde la inoportuna foto de Laporta en el vestuario de Palamós, sabemos que es Rafa Márquez. Vale. Supongamos que el mexicano toma ahora las riendas del primer equipo. Automáticamente ¿Koundé rendirá como en Sevilla o seguirá haciendo buenos a sus compatriotas Mathieu, Lenglet yel Umtiti de la última etapa? ¿Lewandowski volverá a morder como antes del Mundial? ¿Gündogan correrá para atrás sin que le adelante hasta el árbitro? ¿Balde se acordará de poner un balón al área en condiciones? ¿Joao Félix pasará a ser un jugador de partidos en lugar de un futbolista de jugadas? ¿Volverá Dembélé para tener al menos un extremo que se vaya por velocidad? ¿Recuperaremos a Busquets, el faro sin relevo de los últimos 15 años? ¿Las musculaturas de Pedri, Raphinha e Iñigo dejarán de romperse repetidamente? ¿A Ter Stegen y Marcos se les pasará la lumbalgia de golpe? ¿La rodilla de Gavi se curará por arte de magia?
La plantilla del Barça es tan corta que, si faltan 6 piezas, como en Riad, pones lo que queda. ¿Podrían hacerlo mucho mejor? Sin duda. Pero el rival jugó de cine. Y, por cierto, desde la foto de Palamós para presionar a Xavi, ni una sola victoria del Barça Atlètic en cinco partidos. El plan B siempre debería ser mejor que el A. Por ahora, no lo parece ●