La oscura opulencia del City
→ Como se temía desde hace días en la ciudad de nottingham ,ellunes pasados el e comunicó a los dirigentes del club de las East widlands los cargos por incumplimientos financieros de las reglas de rentabilidad y s os tenibilidad (PSR) de la league. básicamente, por el movimiento de 43 jugadores en los tres últimos años realizado por el equipo que preside el griego Evangelos Marinakis y su probable superación del límite de gasto que fija la liga inglesa. Lo mismo le ha vuelto a ocurrir al Everton, ya castigado con 10 puntos de sanción, que se enfrenta ahora a otra posible penalización por sus desviaciones del gasto, por la construcción del su nuevo y moderno estadio en el muelle de Bramley-moore Dock, a orillas del mer se y. sus casos cho can con las amenazas a otros clubs, como el Manchester City o el Chelsea cuyo proceso está siendo mucho más lento y no se espera una resolución en meses.
También el lunes, Pep Guardiola recogió el premio ‘The Best’ como mejor técnico del año en Londres, después de que el sábado el City ganara en el difícil Saint James’ Park de Newcastle, con otra exhibición de dos de sus grandes estrellas, Bernardo Silva y Kevin De
Bruyne, en un aplantilla multimillonaria que intimida con el talento. La imagen de Guardiola agasajado en la gala londinense de la FIFA simbolizó bien los tiempos de éxito y opulencia del manchester City, acumulando éxitospero agarrado a estrellas de gran talento compra das y mantenidas con el dinero--no todavía bienesclarecido--deabudhabi.
El contraste de unos y otros, y el evidente agravio comparativo por cómo se está llevando la investigación
Un total de
115 cargos pesan sobre las cuentas de un City por ahora sin sanción
de los 115 cargos que pesan sobre las cuentas del City, y sobre los balances de la etapa de
Roman Abramovich en el Chelsea, molesta a la mayoría de clubs de la Premier League, especialmente al de los más poderosos clubs del a liga inglesa, de propiedad extranjera y con fondos opacos. Nottingham Forest y E ver ton conocen ya su caso y sus apelaciones tendrán ahora que ser escuchadas dentro de 12 semanas, lo que permitirá, según las nuevas normas de la pre mi er, que cualquier castigo llegue antes del 8 de abril. Ese ajuste a las reglas aseguró que las infracciones financieras fueran sancionables dentro de los 12 siguientes meses. Sin embargo, las supuestas irregularidades del City, y también las del Chelsea, no están cubiertas por esas regulaciones, y sus casos se van a demorar bastante tiempo. Estamos ante un evidente caso de desproporción.
La situación es incómoda incluso para los propios protagonistas. Guardiola se siente molesto con las pregunta se inclusoel clima generales adverso hacia su club: “No hemos sido castigados, y somos inocentes hasta que se demuestre la culpa. Sé que la gente lo quiere. Lo sé, lo siento”. El poderoso Manchester City nunca ha pestañeado en su defensa, insistiendo en que ha seguido las regulaciones, pese a ser acusado de ocultar información financiera respecto a sus ingresos por patrocinios. hay un ruido de fondo amenazando al pero lo que sí parece claro es que las normas deben tratara todos por igual, si el camino tomado lleva a poner fin aun ciclo de gasto excesivo y mala gestión que ha afectado a todo el fútbol inglés●