Mundo Deportivo

Loeb no derriba el ‘muro Sainz’

→ El francés tenía ayer una oportunida­d de oro para intentar remontar pero el español minimizó pérdidas y lidera por 20 minutos a falta de 3 días

- Fabio Marchi

→ Se suele decir que la mejor defensa es un buen ataque. Y así lo corroboró el piloto español Carlos Sainz en la etapa 9 del Dakar 2024. El madrileño partía con una ventaja de 24 minutos en el liderato de la general sobre un Sébastien Loeb, que contaba ayer con una oportunida­d de oro para atacar y recortarle muchos minutos a Sainz para apretar la lucha final por el título del Dakar. Carlos debía resistir en un día complicado, clave para sus aspiracion­es al triunfo. Y lo logró a lo campeón, cediendo tan solo 4’14” frente a Sébastien Loeb, que ganó la etapa. De esta manera, Carlos Sainz lidera el Rally Dakar con 20 minutos y 33 segundos de ventaja respecto al nueve veces campeón del mundo de rallies a falta de solo tres días para el final del Dakar.

Carlos Sainz está a tres días de su cuarto ‘touareg’, todos ellos con marcas distintas, y esta vez, a sus 61 años, la satisfacci­ón sería el doble de grande al poder lograrlo como líder de uno de los proyectos más difíciles de toda su dilatada y exitosa carrera. Quiere ser el primer piloto de la historia en ganar la cita más dura del mundo con un coche electrific­ado con una tecnología pionera, única y complicadí­sima. Está a tres días de lograrlo si la fiabilidad y el siempre cruel recorrido del Dakar se lo permiten.

La fiabilidad de un coche tan complejo, con miles de sensores, es algo impredecib­le y que Carlos no puede controlar. Sí el pilotar evitando problemas que se paguen caros o errores de navegación. El tercer factor que interviene en el camino de Carlos hacia la corona es el de su rival, Sébastien Loeb. Y de momento, los dos elementos que sí están en las manos de Carlos y Lucas Cruz los están dominando a la perfección.

La etapa 9 era un día crucial. ‘Le Patron’ salía encendido, a por la victoria de etapa y a recortar el máximo de minutos sobre Carlos saliendo atrás, desde una muy buena 10ª plaza del orden de arranque.

LAS FRASES Sébastien Loeb

Estrategia perfecta en equipo

Audi se hizo fuerte como equipo. Los tres coches alemanes se juntaron en formación, sacando los escudos y a la vez sus lanzas. Y ahí, Carlos se vistió de Ministro de Defensa dakariano. Ekström salía primero y tiró abriendo pista para marcarle el camino a Carlos con sus huellas en

“Ya de por sí es complicado, y luego está la navegación y los pinchazos. No van a mi favor. Hemos pinchado dos veces y luego hemos rodado con mucho cuidado”

“No tengo motivos para estar asustado. Hago lo mío y al final se harán las cuentas”

la primera parte. Y Peterhanse­l, un 14 veces campeón entre motos y coches, que podría estar viviendo su último Dakar, lució su enorme espíritu de equipo al pararse en los primeros metros para esperar a Carlos y rodar junto a él para ayudar a su amigo por si sufría algún problema.

Loeb atacaba y atacaba, pero se daba una y otra vez contra ‘el muro Sainz’ y contra la mala suerte. “Ya de por sí es complicado, y luego está la navegación y los pinchazos. No van a mi favor. Hemos pinchado dos veces en la primera mitad, así que luego hemos ido con mucho cuidado. No estoy siempre pendiente de lo que hace Carlos y tampoco tengo motivos para estar asustado. Hago mi carrera y al final se harán las cuentas”, comentó Loeb.

Tras el kilómetro 260, Carlos atrapó a Ekström y capitaneó la formación de Audi abriendo pista. Ni así perdió el tiempo esperado: 4 minutos y 14 segundos respecto a Loeb, insuficien­te para el francés.“estoy contento de acabar otro día más”, expresó Carlos, sin dar nada por hecho. Aún queda mucho, pero todo va por buen camino ●

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Foto: A.S.O. Carlos Sainz se defendió muy bien de los ataques de Loeb junto a sus compañeros Ekström y Peterhanse­l
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