Un toque de atención camino al Preolímpico
→ Ribera analiza el KO europeo: “Nos ha faltado intensidad defensiva”
→ Debut del Europeo y símil pugilístico entre dos pesos pesados: España sale tanteando al rival, Croacia empieza al 100% e, intensa con dos marchas más, mete un puñetazo que lleva enseguida a la lona a su rival. España se levantó, sí, pero diríase que quedó grogui no sólo para el resto del partido (29-39) sino del campeonato: eliminación en la primera fase tras empatar después contra Austria (33-33).
Sorprendió ese fallo de cálculo de los ‘Hispanos’, tan expertos en estas lides, pero ese tremendo golpe ya marcó mucho su torneo y, a diferencia de otros años, siempre yendo de menos a más hasta el éxito, esta vez no les alcanzó para revertir la situación: fallos propios, sobre todo en defensa, aciertos del rival y suerte maléficamente esquiva (tres partidos, tres lesionados) acabaron con su racha prodigiosa de cuatro finales europeas seguidas, con dos oros (2018, 2020) y dos platas (2016, 2022). El guiño final a esa mala suerte queda resumido en su caprichosa clasificación final (13º), el número de los supersticiosos por antonomasia.
Curiosidades aparte, el KO de España es más decepcionante porque el listón que han puesto Jordi Ribera y sus jugadores es altísimo: seis medallas de nueve posibles desde su llegada en 2016 es un botín extraordinario que hay que valorar como tal porque han convertido el podio en regla cuando no lo es, menos en el contexto actual de gran competitividad mundial.
Este Europeo es un toque de atención, pero el crédito de Ribera y los suyos sigue intacto, ya dirigido de lleno a la clasificación para los Juegos. El bronce del Mundial de 2023 ya aseguró a España un Preolímpico más amable en marzo: Brasil, Bahrein y un equipo europeo por determinar serán los rivales con dos plazas en juego para París’2024 y, por tanto, pinta bien.
“Cosas negativas que han pasado han servido para levantarse y hacer grandes cosas y, después del luto, tenemos que entender que esto tiene que ser un impulso para buenos resultados y el primero tiene que ser el Preolímpico”, dijo Ribera a sus jugadores tras el KO.
“Nos han eliminado, pero no soy de llorar. No supimos estar ante Croacia y cometimos errores muy ingenuos en momentos importantes contra Austria, no aprovechamos nuestras oportunidades. Nos faltó acierto y tengo que asumir mi responsabilidad. Está claro que a lo largo del campeonato nos ha faltado más intensidad defensiva, es uno de los puntos negativos y tenemos que seguir trabajando en ello”, analizó Ribera.
“Esa presión que tenemos de ganar cada partido es un peso que probablemente también hemos notado y, aunque parezca que no, siempre hay que tener un pelín de suerte y, evidentemente, no la hemos tenido. Esta vez no hemos superado los obstáculos”, añadió ●