El Dépor gana a un Cornellà que se estrella en Germán
→ El guardameta deportivista evitó el empate con paradas de mucho mérito
PRIMERA FEDERACIÓN- G1
→ El gol de Hugo Rama en el primer periodo y la resistencia del Dépor en defensa ante un insistente Cornellà bastó a los coruñeses para llevarse un choque con una parte para cada equipo.
Arrancó el Dépor llevando el control del balón, topándose ante un Cornellà rocoso en defensa. Diagonales y recortes de un eléctrico Yeremay y asociaciones de Hugo Rama, que se filtró entre el entramado verde para hacer daño a la espalda de los pivotes. A la media hora, el cuadro visitante encontró puerta. Balenziaga, que superó en velocidad a José Mas, asistió a Hugo Rama que llegando desde la segunda línea batió a Miño con un disparo cruzado. Antes de entrar, el balón tocó en un jugador y se desvió lo justo para sorprender al meta cornellanense.
Como reacción, el Cornellà despertó y gozó de una doble ocasión en dos minutos, pero Germán Parreño estuvo intratable. Clau Mendes empalmó un chut a la media vuelta en el punto de penalti que forzó la estirada y mano de Parreño para enviar el cuero a córner. En ese mismo saque de esquina, el meta ilicitano sacó una mano en el primer palo. A falta de un minuto para el descanso, Marc Tenas realizó una magnífica maniobra dentro del área recortando, pero el trallazo salió desviado.
En la reanudación, el Cornellà tomó las riendas del encuentro y fue mejor. La insistencia verde fue especialmente a balón parado. Mendes volvió a obligar la intervención de Parreño en un testarazo forzado. Aunque el rumbo del choque pudo haber cambiado si Barbero, al mi- nuto de iniciar, llega a introducir el cuero a la portería, pero su cabezazo, solo ante el portero, se marchó por encima del travesaño.
Transiciones rápidas del conjun- to coruñés, que pudo matar el parti- do en diversas ocasiones. La más clara fue de Rama, quien pecó de avaricioso y salió su disparo alto. De nuevo, el Cornellà dispuso de una doble ocasión de Tenas y Mendes: el primero golpeó fortísimo y respon- dió con soberbia Germán. El recha- ce lo envió alto Mendes ●