Van der Poel busca el doblete en el ‘Infierno’
→ La París-roubaix consta de 55,7 km de pavé
→ Todo listo hoy en el ‘Infierno del Norte’ para recibir a los valientes ciclistas que se atrevan a desafiar la lógica en la 121ª edición de la Parísroubaix, clásica monumental ciclista marcada por la dureza extrema, por el barro y por los tramos de adoquín, que este año se amplían hasta los 55,7 kilómetros, por los 54,5 km del año pasado, tras la recuperación de los sectores de Briastre (km 111,3) y la aldea de Buat (km 128,5). Los primeros 100 kilómetros de carrera se desarrollan sobre asfalto, un calentamiento para la pelea en las piedras que empieza a la salida del pueblo de Troisvilles (km 96,3) y sigue el traqueteo en Quievy, uno de los dos sectores más largos con 3,8 kilómetros, seguido en esta edición por otro duro sector de tres kilómetros (Vieslybriastre), que regresa a la carrera tras su última aparición en el 2019.
Habrá que estar atentos a la colocación de los principales favoritos a la victoria a estas alturas de la prueba. El equipo Alpecin alineará a Jasper Philipsen junto a Mathieu Van der Poel, vencedor en la pasada edición, como principales bazas; Visma centrará sus esperanzas en el ex ganador Dylan van Baarle (2022), el Soudal confía en Kasper Asgreen, mientras que Lidl-trek respalda a Mads Pedersen y el UAE Team Emirates a Nils Politt. Movistar Team espera que Oier Lazkano e Iván García Cortina vuelven a estar entre los mejores como en las clásicas belgas.
El ganador se decidirá en el Velódromo André-pétrieux, donde ayer la belga Lotte Kopecky (SD Worx) se impuso en la 4ª París Roubaix femenina, disputada entre Denain y Roubaix con un recorrido de 148.5 kilómetros. Kopecky se convertía en la primera mujer en la historia que ganaba en el ‘Infierno del Norte’ con el maillot de campeona del mundo, que hoy también lucirá Mathieu Van der Poel ●
Oier Lazkano e Iván García Cortina centran las esperanzas españolas