Tarde de reinas en la fiesta de La Romareda
→ Su Majestad doña Letizia presidió la final en la que las culés sumaron su décima Copa
→ La final de la Copa de SM la Reinaiberdrola volvió a contar ayer con la presencia en el palco presidiendo el partido de Su Majestad la Reina doña Letizia, después de no haber asistido a tal evento desde la final de 2019. Su entrada al palco de La Romareda fue discreta porque coincidió con la ceremonia de salida de los equipos, pero como ya ocurrió en anteriores ocasiones con motivo de finales masculinas con presencia de aficionados catalanes y vascos en las gradas, en cuanto comenzaron a sonar los primeros acordes del himno de España arrancó una sonora pitada por parte de la grada. Antes, las calles de Zaragoza habían sido una fiesta del fútbol femenino y un ejemplo de hermandad entre aficiones que tuvo su colofón en la llegada de los autocares al estadio de La Romareda. Decenas de miles de aficionados y aficionadas agrupados a las puertas, entremezclados muchos de ellos, dedicaron los primeros cánticos de la tarde a sus equipos con un respeto mutuo digno de envidiar por cualquier afición del mundo.
La capital aragonesa se tiñó de txuri urdin y de azulgrana desde primera hora. Las calles del Tubo eran un reguero constante de seguidores y seguidoras dispuestos a vivir una gran fiesta. Los procedentes de Donosti soñando con un milagro y los que llegaron de Barcelona pensando en levantar una nueva Copa. Con todo el respeto a la Real Sociedad, posiblemente ningún culé le daba ni un 1% de opciones a su rival.
Una vez echó a rodar el balón, las azulgrana deleitaron con su fútbol a su majestad doña Letizia, que estaba acompañada en la primera fila del palco de autoridades por la vicepresidenta adjunta de la RFEF, María Ángeles García Chaves, el presidente
Las jugadoras se tuvieron que poner las medallas ellas y se pitó el himno al inicio
del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, la ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, Pilar Alegría, Joan Laporta, presidente del FC Barcelona y Ángel Oyarzun, vicepresidente primero de la Real Sociedad. Antes de ocupar sus lugares en el palco de autoridades, y a la llegada de Doña Letizia al estadio de La Romareda, se produjo el tradicional saludo institucional y la entrega de obsequios conmemorativos a Su Majestad por parte de los responsables máximos de los clubs finalistas: Joan Laporta como presidente del FC Barcelona, y Ángel Oyarzun como vicepresidente primero de la Real Sociedad.
La nota menos positiva llegó ya con el final del partido, cuando tocaba premiar a las ganadoras y reconocer a las subcampeonas. Alexia Putellas subió al palco a recibir de manos de la Reinaletizia la Copa, pero sobre el césped las jugadoras de los dos conjuntos tuvieron que colocarse ellas mismas las medallas de campeonas y subcampeonas, en ausencia sobre el césped de ninguna de las autoridades presentes en el palco de honor, a pesar de haber un escenario habilitado en el verde para que el Barça celebrase el título. Un borrón en una gran fiesta ●