Maiale, el cerdo submarino
El instrumento utilizado para la incursión en el puerto de Alejandría fue un torpedo de cinco metros y medio de largo y tan sólo medio metro de diámetro, con una dotación de dos hombres. Este ingenio fue bautizado durante su desarrollo con el nombre de Maiale (cerdo, en italiano), tras producirse una anécdota: en un ensayo, los tripulantes se fueron al fondo con el torpedo y uno de ellos, al emerger, descargó su frustración refiriéndose de ese despectivo modo al artefacto. A partir de entonces, estos torpedos serían conocidos con ese nombre, que incluso fue utilizado para denominar a sus tripulantes.
El Maiale estaba impulsado por un motor eléctrico silencioso y se desplazaba a una velocidad de 4 km/h. Tenía una autonomía de 16 km y podía navegar sumergido hasta unos treinta metros de profundidad. La parte media del torpedo era una cámara estabilizadora que permitía sumergirlo o hacerlo emerger. La parte anterior era desmontable: una cabeza explosiva de 300 kg, que se podía sujetar a cualquier lugar mediante un cable que se pasaba por una anilla.
Los tripulantes llevaban sobre el traje de buzo un aparato Davis, un dispositivo respirador patentado en Gran Bretaña y construido en Italia que permitía una inmersión de hasta seis horas. Para transportar el torpedo al lugar de la acción se utilizaban contenedores estancos, asegurados a la cubierta de un submarino.