Presumidos por muchos motivos
ERA HABITUAL QUE HOMBRES Y MUJERES EGIPCIOS SE MAQUILLARAN, ya que hacerlo les proporcionaba la inestimable protección de dos de sus deidades predilectas, Horus y Ra.
Además, en el Antiguo Egipto creían que el maquillaje que se aplicaban sobre la cara tenía poderes curativos, y no iban del todo desencaminados: se ha demostrado que los cosméticos a base de plomo usados a lo largo del valle del Nilo ayudaban a evitar infecciones en los ojos. El cosmético más común lo fabricaban moliendo minerales como la malaquita y la galena; con esta mezcla obtenían la sustancia llamada kohl, que se aplicaban alrededor de los ojos con instrumentos hechos de madera, hueso y marfil.
Las mujeres también se daban pintura roja en las mejillas y se teñían las manos y las uñas con bellos dibujos hechos de henna. Asimismo tenían la costumbre, tanto los hombres como las mujeres, de utilizar diversos y ricos perfumes, que elaboraban a base de aceite, mirra y canela.