CON LA BIBLIA EN EL BOLSILLO
DURANTE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL, se hizo sumamente popular una leyenda urbana que aseguraba que muchos soldados habían salvado la vida gracias a llevar consigo una ligera Biblia de bolsillo, que les había protegido el corazón de los disparos. No está muy claro si por fe religiosa o por superstición, pero los ejemplares de bolsillo de la Biblia se agotaron en Gran Bretaña durante la guerra. Eran las madres las que, esperando un milagro, enviaban estos volúmenes a sus hijos, en la creencia de que servirían para protegerles literalmente de las balas enemigas.
Sea como fuere, solo están documentados dos casos, durante toda la guerra, en los que una Biblia detuvo metralla enemiga y le salvó la vida a su afortunado poseedor.