BRIGADA POMORSKA: MITO Y REALIDAD
Las cargas de la caballería polaca contra la Blitzkrieg alemana han generado incontable literatura y no poca mitología, seguramente por el encanto anacrónico y “romántico” de imaginar a un jinete desenvainando la espada para enfrentarse a pecho descubierto a un carro blindado. En concreto, eso es lo que se contó durante décadas –principalmente en Polonia– de la carga efectuada por un regimiento llamado la Brigada Pomorska en el corredor de Pomerania durante la Batalla de la Frontera, el 2 de septiembre de 1939 (esto es, el segundo día de la invasión alemana): que sus integrantes, a sabiendas de que iban a ser aniquilados, se lanzaron valerosamente espada en mano contra los Panzer.
Pero esta versión de la historia, según los investigadores, no es cierta. La Pomorska combatió ese día, en efecto –y otros más, pues no fue aniquilada en la acción, aunque cayeron 20 de sus 50 jinetes–, pero no contra carros blindados: salieron al galope de un bosque para sorprender al descubierto a un batallón de infantería, que, atónito ante su velocidad y sus sablazos, tardó en reaccionar y fue diezmado. Fue un golpe de efecto muy corajudo, sin duda, como muchos otros que protagonizó la caballería polaca, pero que se reveló ineficaz al igual que todos ellos; cuando el batallón se recompuso, sus ametralladoras pusieron en fuga a los caballeros y dieron la victoria final a los alemanes.