JUAN MARCH, EL MILLONARIO ENEMIGO DE LA REPÚBLICA
El ministro de Hacienda Jaime Carner advirtió de la peligrosidad de un hombre cuyas actividades irregulares estaban siendo investigadas por el recién nacido gobierno republicano con estas palabras: “O la República somete a March, o March someterá a la República”. El banquero mallorquín Juan March Ordinas ( 1880- 1962) fue detenido y encarcelado en junio de 1932, acusado de contrabando y colaboración con la dictadura de Primo de Rivera. Como afirma el historiador Ángel Viñas, “fue el financiador más importante de la conspiración monárquica y de su logro más significativo: la adquisición de aviones de guerra modernos o muy modernos con objeto de apoyar el golpe” que impulsaría un grupo de militares seducidos por la idea de implantar un régimen similar al de la Italia fascista.
Tras el triunfo del Frente Popular en febrero de 1936, los conspiradores entendieron que la única opción para derrocar al gobierno republicano era disponer de armamento moderno. El banquero March era el hombre idóneo para conseguir divisas. Declarado “acérrimo enemigo” de los republicanos, su red internacional de negocios, señala Viñas, “le permitía disponer de fondos en el extranjero como mejor quisiera”. Según Eugenio Torres Villanueva, el banquero entregó 500.000 libras a los conspiradores antes del golpe de julio, cifra que se elevó a 800.000 en agosto y a 940.000 en diciembre.