LA REPÚBLICA DE ANNOBÓN
En Annobón, una pequeña isla que pertenece al territorio de Guinea Ecuatorial, fue delegado del Gobierno el cabo de la Guardia Civil Restituto Castilla. Según ha estudiado Gustavo Nerín, Castilla, radicalmente anticlerical, se enfrentó a los misioneros claretianos que ejercían un férreo control de la población. Con la llegada de la II República, el cabo trató de materializar en Annobón las reformas del nuevo régimen. Así, confiando en el apoyo gubernamental, lanzó una ofensiva contra la misión, inspeccionando su escuela, y amenazó a los misioneros con pedir al Gobierno un ministro laico y el traspaso de la escuela al Consejo de Vecinos. Pese a sus intentos de reforma, Castilla fue muy impopular por su violencia y los trabajos forzados que imponía a los habitantes de la isla, lo que motivó que las autoridades republicanas decretaran su cese. El 13 de noviembre de 1932, el gobernador Gustavo de Sostoa Stahmer acudió a la isla para destituir a Castilla, pero este lo asesinó. Tras el crimen, trató de sublevar a la población y proclamar la República de Annobón. Detenido al día siguiente, fue condenado a ocho años de prisión por homicidio y puesto en libertad por la amnistía de febrero de 1936. Durante la Guerra Civil se unió a la Guardia Nacional Republicana, en la que ascendió al grado de capitán. Capturado al final de la guerra, fue fusilado en Madrid en abril de 1940.