LA AZAROSA VIDA DE BILL AALTO
Es imposible disociar la vida Irving Goff de la de William Aalto, tanto por sus orígenes similares como por una carrera política y militar que cursaron unidos hasta el final.
Si la familia de Goff procedía de Odessa, la de Aalto emigró desde Finlandia. Nació en el Bronx, Nueva York, el 30 de junio de 1915, donde su madre era una conocida activista política en favor del Partido Comunista. Al igual que en el caso de Goff, Aalto alternó una temprana militancia política con el sindicalismo y trabajos de subsistencia como conductor de camiones.
Con apenas 21 años llegó a España en febrero de 1937 y fue adscrito a la brigada Lincoln, donde poco después conocería a Irving Goff. Desde entonces se hicieron inseparables. Recibieron a la vez formación en guerrilla y sabotaje y participaron juntos en las mismas operaciones especiales, incluida la voladura del puente en Albarracín y el asalto a Corchuna.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Goff le reclamó en la OSS, pero su condición homosexual le cerró las puertas, denunciado por alguno de sus compañeros. No obstante, Donovan quiso aprovechar su experiencia y lo destinó a misiones de entrenamiento en Estados Unidos. En 1943, mientras impartía un curso de adiestramiento de explosivos en Maryland, perdió una mano a consecuencia de una detonación incontrolada.
A partir de ese momento, Bill Aalto comenzó un declive personal del que se refugió en la bebida y la poesía. Cursó estudios en la universidad de Columbia e intentó hacerse un nombre como poeta, sin éxito.
Viajó por Europa en los años 50, como amante del poeta W. H. Auden y posteriormente de James Schuvler, profundizando una crisis personal que acrecentó su alcoholismo y provocó frecuentes episodios de violencia e ira. Murió de leucemia en Long Island en 1958, con 43 años.