MÁS BUSCADA DE LA HISTORIA
Se titula London After Midnight y fue una de las producciones más exitosas del tristemente olvidado Tod Browning, director del mejor Drácula de la historia del cine –con Bela Lugosi en el papel del conde– y de la obra maestra La parada de los monstruos, que causó tal colección de gritos y desmayos en su estreno que hizo que a los pocos días fuera retirada. Junto a él trabajó Lon Chaney, la primera gran estrella del cine de terror, al que llamaban el Hombre de las Mil Caras, tanto por su capacidad de interpretación como por el maquillaje que solía emplear y que él mismo inventaba. Eran amigos y colaboraron en varias cintas. Una de ellas fue esta, estrenada en 1927.
EN ELLA, EL DUEÑO DE UNA CASA EN LAS AFUERAS DE LONDRES, SIR ROGER BALFOUR, APARECE MUERTO por herida de bala en lo que parece ser un suicidio. Cinco años más tarde, con el caso aún sin resolver, un hombre de dientes puntiagudos y un sombrero de copa de piel de castor –interpretado por Chaney– llega al domicilio acompañado por una mujer de aspecto cadavérico. Su aparición hace que el inspector Burke –que también encarna Chaney– tome cartas en el asunto. Este descubre que las tres personas que ahora ocupan la vivienda eran las únicas que habían estado presentes un lustro atrás, cuando Balfour falleció. Entonces, su cuerpo desaparece de su tumba y un individuo que se le parece empieza a merodear alrededor de la casa. Sucesos misteriosos se suceden, mientras el enigmático personaje con sombrero de castor atemoriza al vecindario. Burke decide que recrear la muerte de Balfour y desenmascarar al asesino.
LA PELÍCULA, QUE ENCANTÓ A LOS AFICIONADOS AL GÉNERO, RECAUDÓ 1.004.000 DÓLARES EN TAQUILLA, con un coste de producción de 152.000. En 2014, el único cartel conocido de la misma fue adquirido por un comprador anónimo que pagó 151.666 dólares, lo que lo convirtió en la lámina de este tipo más valiosa jamás vendida en una subasta pública. Con el tiempo, el filme se convirtió en una obra de culto; en 1967, la última copia fue víctima de un incendio en el almacén de la productora, MGM. Desde entonces se ha buscado sin descanso alguna otra, pero sin éxito. En 2002, Turner Classic Movies presentó una versión reconstruida en la que se usó el guión y diversas fotografías. Se sabe que también se estrenó en Alemania, Portugal, Italia, Polonia y España –aquí se tituló La casa del horror–. Quizá en algún oscuro rincón, una copia de la producción original espere a ser descubierta. Dar con una se ha convertido en la búsqueda del grial de las películas perdidas.